Si estás a punto de revisar tu hipoteca lee esto para pagar menos

Con el Euríbor en niveles muy altos y la incertidumbre económica ocasionada por el hundimiento de dos entidades bancarias en EEUU, lo cierto es que quienes tienen que revisar su hipoteca variable en los próximos meses pueden ver incrementado el importe del recibo mensual por encima de los esperado.

Las hipotecas de tipo variable, que durante muchos años se han beneficiado de la política de tipos bajos o incluso negativos impulsada por el Banco Central Europeo (BCE), se enfrentan ahora a una escalada de precios que en el caso de una hipoteca media de 150.000 euros a 30 años podría llegar a suponer entre 200 y 300 euros al mes.

¿Qué se puede hacer para evitarlo?

Existen varias alternativas para intentar atenuar el efecto de la subida de tipos en la hipoteca. La primera sería intentar renegociar con la entidad bancaria. En este caso la entidad podría aumentar el margen de bonificación en el variable aplicado a la hipoteca para intentar recudirlo al máximo y que solo se aplique la subida del Euribor.

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Otra opción, quizá algo más costosa, es intentar subrogar la hipoteca con una nueva entidad que ofrezca mejores condiciones. En la situación actual y con las últimas subida de tipo es bastante complicado encontrar ofertas a tipo fijo que bajen del 3% y en el caso de las variable bonificadas es posible lograr diferenciales por debajo del 1%, al que habría que seguir sumándole el Euribor.

Por último, y es la opción que más recomiendan los expertos entre quienes tienen capacidad económica, es amortizar parte de la hipoteca. De hecho, miles de clientes han optado por esta opción en lugar de por buscar mejores ofertas dadas las complicaciones y el papeleo.

Así puedes evitar la subida del recibo de la hipoteca

Amortizar parte de la hipoteca, la mejor opción

Aunque no lo parezca, el hecho de amortizar dinero de la hipoteca permite reducir sensiblemente los intereses a pagar sobre el capital total. El ahorro de intereses es mayor al amortizar hipoteca, sobre todo si el préstamo es reciente, dado que es en los primeros años cuando se abonan más intereses que capital.

En este caso los expertos insisten en que hay dos alternativas en la amortización. Reducir capital o bien plazo. Coinciden en que a largo plazo es más conveniente reducir plazo porque de ese manera se reducirán más los intereses al acortar el plazo de amortización total del préstamos hipotecario. En el caso de reducir capital, la hipoteca tendrá el mismo periodo de amortización pero el cliente puede reducirse un poco la cuota mensual.

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