Mercadona se lanza al autoconsumo masivo para ahorrar costes energéticos

Un establecimiento con placas solares reduce un 20 % las compras de electricidad

Tienda de Mercadona con placas de autoconsumo en Burriana. | LEVANTE-EMV

Tienda de Mercadona con placas de autoconsumo en Burriana. | LEVANTE-EMV / ramón ferrando. valència

Ramón Ferrando

Ramón Ferrando

Mercadona se ha lanzado al autoconsumo a gran escala para controlar su factura de la luz. La cadena de distribución tiene intención de multiplicar por nueve su potencia instalada y pasar de los actuales 28 MW (que generan 38.000 paneles solares) a 250 MW en 2030. La cadena de alimentación aspira a contar con instalaciones de autoconsumo en más de 900 tiendas así como en todos los almacenes y en los centros de distribución de las compras online (las conocidas como colmenas), según confirmaron a Levante-EMV fuentes cercanas al proyecto. Mercadona dispone en estos momentos de instalaciones de autoconsumo en más de un centenar de tiendas, nueve almacenes, tres colmenas y en las recién estrenadas oficinas de Albalat dels Sorells. Estas plantas de autoconsumo han producido 21,6 GWh de electricidad y han permitido el ahorro de 6.500 toneladas de CO2.

La cadena ya ha reforzado este año su compromiso con la energía fotovoltaica y prevé invertir en 2023 aproximadamente 60 millones de euros en la instalación de paneles solares en sus cubiertas, lo que incrementará significativamente la reducción de emisiones por consumo eléctrico.

Toneladas

Cada establecimiento de Mercadona ahorra aproximadamente un 20 % de su consumo energético anual respecto a una tienda sin esta energía implantada y reduce aproximadamente 30 toneladas de CO2. Desde 2015 la compañía ha reducido en un 38 % su huella de carbono y, en consecuencia, los gases de efecto invernadero que afectan al aumento de la temperatura global del planeta.

La apuesta por obtener energía de forma sostenible arrancó a finales de 2020 en algunas de sus tiendas. La empresa afianzó su hoja de ruta por el autoconsumo fotovoltaico en 2021 y en 2022 (año en que se desbocó el precio de la electricidad por la invasión rusa de Ucrania) invirtió 14 millones de euros en la instalación de nuevos paneles solares, evitando así la emisión de más de 3.000 toneladas de CO2 en un año.

La previsión de la compañía es tener a finales de 2023 un total aproximado de 350 tiendas con placas solares y ampliar el número de bloques logísticos y colmenas con paneles fotovoltaicos en sus cubiertas. Con toda esa potencia instalada esperan ahorrar la energía equivalente al consumo anual acumulado de 125 tiendas.

El objetivo de la empresa de distribución para el año 2027 es tener autoconsumo en más de 850 tiendas y en todos sus bloques logísticos y colmenas, lo que supondrá un ahorro en electricidad equivalente al consumo de 300 tiendas, según la compañía.

Por el momento, la empresa no ha llevado a cabo instalaciones de autoconsumo con vertido a la red de distribución. Según las mismas fuentes, las tiendas con instalaciones de autoconsumo utilizan la totalidad de la electricidad que producen y los domingos son el único día que Mercadona tiene energía excedente al estar cerrados los establecimientos.

Mercadona ha confiado en la empresa valenciana Prosolia para desplegar parte de sus instalaciones de autoconsumo en la Comunitat Valenciana. En concreto, la empresa es responsable de la puesta en marcha de este tipo de plantas en ocho tiendas.

«Con esta iniciativa, Mercadona aporta en la transformación del actual modelo energético. Pero además, apostando por energías renovables como la solar, no solo hacen más sostenible su propio negocio, sino que contribuyen a divulgar entre la sociedad esa preocupación por el cuidado del medio ambiente», afirma Javier Martínez, CEO de Prosolia. La firma ya ha instalado los paneles en supermercados de Mislata, Villalonga, la Vila Joiosa y Callosa de Segura. Prosolia está afrontando este año la instalación de otras cuatro plantas de autoconsumo en tiendas ubicadas en la Comunitat Valenciana.

La industria valenciana ha apostado con fuerza en el último año por el autoconsumo fotovoltaico para mantener a raya el precio de la luz. Las empresas concentran la mitad de este tipo de instalaciones de placas solares que hasta ahora se colocaban sobre todo en viviendas unifamiliares.

El número de instalaciones de autoconsumo se ha duplicado en el último año al pasar de 24.465 a más de 51.000, según datos de la Generalitat. La demanda de plantas de autoconsumo ha generado una lista de espera de hasta tres meses por la falta de mano de obra especializada, según la empresa Linkener. Los instaladores apuntan que un hogar puede amortizar el coste de la planta en cuatro años y una empresa en dos, ya que el ahorro de la factura ronda entre el 20 % y el 60 %.

Este tipo de instalaciones tienen un coste medio de unos 85.000 euros en el caso de las empresas con una cubierta de 1.000 metros cuadrados y de entre 6.000 y 12.000 euros (si va con baterías o no) en el caso de los hogares.

Ayudas públicas

La Generalitat está dando ayudas de hasta el 50 % para fomentar el autoconsumo y los ayuntamientos ofrecen bonificaciones del IBI. En el caso de las empresas, la instalación suele estar condicionada por el tamaño de la cubierta. Estas plantas de autoconsumo pueden llegar a tener una vida útil de hasta 25 años, según precisa la patronal valenciana de energías renovables (Avaesen).

La industria valenciana concentra la mitad de las instalaciones

Los empresarios apuestan por las placas solares para controlar el precio de la luz

Ramón Ferrando. valència

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