Baleària va a exportar al Caribe su modelo de transporte marítimo total con el que ha conseguido el liderazgo en España. La naviera valenciana que lidera Adolfo Utor ultima la conexión diaria entre Puerto Rico y Republicana Dominicana con buques de pasajeros, turismos y camiones. La firma comenzó a operar hace una década la ruta entre Florida (Estados Unidos) y Bahamas y ahora se va a expandir en el resto del Caribe. Además, la compañía confía en que el tráfico marítimo por ferri entre Cuba y Estados Unidos se desbloquee «más pronto que tarde».
El presidente de Baleària, Adolfo Utor, acaba de regresar del Caribe donde ha avanzado en la apertura de la ruta entre República Dominicana y Puerto Rico. Utor confiesa a Levante-EMV que en el mar Caribe tienen «un proyecto ambicioso». «Nosotros pretendemos replicar nuestro modelo de negocio de España en el Caribe. Allí donde hay desarrollo económico existe el modelo de transporte de pasajeros, turismos y mercancías rodadas», asegura.
Potencial del Caribe
El impulsor de la naviera valenciana explica que Estados Unidos ha descuidado el comercio con las islas caribeñas y está convencido del potencial de negocio en la zona. «Yo creo que Estados Unidos ha vivido de espaldas al Caribe: Bahamas, República Dominicana, Jamaica, Haití y, por supuesto, Cuba. Allí lo único que hay son cruceros y portaconedores, que en el mejor de los casos tienen un plazo de entrega de un mes y que cuando se trata de islas pequeñas se van a dos y tres meses. No hay libre mercado, que es un elemento fundamental para el desarrollo. Por eso Centroamérica es tercer mundo», apunta.
"Todo por hacer"
El fundador de Baleària subraya que en cuestión de transporte marítimo en el Caribe «está todo por hacer» ya que no hay ni rutas de ferri ni infraestructuras al carecer de una red capilar de transporte. Baleària comenzó a operar la línea entre Florida y Bahamas hace doce años y actualmente une Fort Laudedale (a 40 minutos de Miami) con Bimini y Grand Bahama (Bahamas). «Nosotros desembarcamos en Estados Unidos con la conexión con Bahamas con muchas dificultades. Las leyes de frontera de Estados Unidos son muy complicadas porque no permiten el transporte de coches, pero hemos consolidado ya tráficos con Bahamas. Ahora estudiamos tráficos entre Puerto Rico y República Dominicana. Estuvimos con el tema de Cuba, que se frenó con Trump cuando ya teníamos las licencias americanas y muy avanzadas las cubanas. Ahora tratamos de convencer a los mandatarios de la zona de la importancia de romper la autarquía que cada territorio tiene», añade Utor.
Antes de fin de año
Baleària quiere empezar a operar la conexión entre República Dominicana y Puerto Rico (que están a una distancia de entre 3 y 7 horas en ferri en función del destino) antes de final de año. La compañía trabaja en conectar Mayagüez (Puerto Rico) con los puertos dominicanos de San Pedro de Macoris o Boca Chica (situados cerca de Santo Domingo) y con la misma Punta Cana o Cap Cana (en el este de la isla).
Tercer intento
Es la tercera vez que Baleària intenta entrar en Puerto Rico. «Lo intentamos dos veces. En la primera el huracán María (septiembre de 2017) barrió Puerto Rico y lo dejamos porque aquello quedó como un solar. Cuando lo reemprendimos por segunda vez llegó la covid. Esperamos que a la tercera vaya la vencida», confiesa Utor. La naviera va a arrancar con un barco y destinará «un segundo al poco tiempo. Estamos barajando utilizar un fastferri y un ferri».
Cuba
La compañía lo tenía prácticamente todo preparado para cubrir la línea entre Cuba y Florida hace siete años, pero la victoria de Donald Trump en las presidenciales de 2016 truncó sus planes. Utor confía en que al final se desbloquee la situación. «Yo espero ver la conexión entre Cuba y Estados Unidos más pronto que tarde. Aquello es algo que debe caer por gravedad. Nadie esperaba que el telón de acero fuera a caer nunca y con Gorbachov pasó», recuerda Utor.