Las profesiones más envejecidas

Sectores como las tecnologías de la información, peones de transporte, ocupaciones militares, camareros o dependientes en comercios son las actividades donde los trabajadores de 55 a 64 años tienen una menor presencia

Trabajos en una fábrica de calzado de Alicante, en una imagen de archivo.

Trabajos en una fábrica de calzado de Alicante, en una imagen de archivo. / Levante-EMV

Hay ocho grandes sectores de actividad económica donde el peso de los trabajadores más mayores es superior al de otras ocupaciones, lo que implica que se trata de unos grupos de negocio laboralmente envejecidos, según el informe publicado por la Fundación BBVA sobre «Dimensiones económicas de la longevidad» y suscrito por Alba Catalán y Joaquín Maudos, ambos del Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (IVIE). En dicho documento los sectores que se identifican son los siguientes: agricultura, agua, transporte y almacenaje, actividades administrativas y de servicios, administraciones públicas, educación, sanidad y actividades del hogar.

El mismo documento se detiene también en las profesiones, muchas de ellas incluidas en dichas grandes actividades, que tienen una mayor proporción de trabajadores próximos a la edad de jubilación. Como se ve en el cuadro adjunto, el primer lugar de este escalafón corresponde a la industria del tabaco, con casi un 39 % de personas mayores de 55 años. Otras ocupaciones son la industria textil, la industria del calzado y el cuero o algunas ya citadas de las administraciones públicas como los oficios de educación y sanidad. Asimismo figuran el personal doméstico o el servicio de correos.

Médicos realizando una cirugía.

Médicos realizando una cirugía. / CMG

Profesiones

El documento detalla también el otro lado de la balanza, es decir, las actividades donde hay menos trabajadores con entre 55 y 64 años. Hablamos, por tanto, de las profesiones menos envejecidas. El primer lugar lo ocupan los profesionales de las tecnologías de la información, con solo un 3,9 % de su plantilla en esas edades. Peones del transporte, ocupaciones militares, cajeros y taquilleros (excepto bancos), dependientes en tiendas o almacenes y profesionales de las ciencias físicas, químicas, matemáticas y de las ingenierías figuran en el grupo con porcentajes inferiores al 10 %. Ligeramente por encima, con el 10,3 %, están los camareros.

El informe apunta en sus conclusiones que algunos de los sectores envejecidos «tienen un elevado peso en la economía, por lo que es muy importante el relevo generacional, como es el caso de los ocupados de las administraciones públicas o en sanidad y servicios sociales, donde el porcentaje de ocupados mayores es superior en España que en el área del euro».

Acto seguido, los autores del estudio añaden que «la baja productividad de algunos sectores puede estar relacionada con el elevado peso de ocupaciones en las que hay un elevado porcentaje de personas mayores», aunque a continuación apunta que «el proceso de automatización del empleo que se está desarrollando infuirá en el futuro próximo en la productividad, por lo que el factor edad podría no ser tan relevante y tener más peso la formación específica de las personas en el desempeño de estos empleos».

En relación con esto, el documento apunta dos consejos. Por una parte, aboga por la existencia de un relevo generacional para asegurar la continuidad de los sectores con un peso más elevado de los trabajadores mayores de edad, «a la vez que aumentaría su productividad con gente joven más formada». Por otra, el «necesario relevo generacional» debe ser «progresivo con entradas continuas de nuevos colectivos de trabajadores», ya que el parón que se ha producido con la crisis «impide la necesaria transmisión de capital humano.

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