Innovación educativa con videojuegos para adaptar el aprendizaje a cada alumno

La valenciana Zynergic ofrece herramientas a docentes para transmitir conocimientos entendiendo mejor al estudiante

Innovación educativa con videojuegos para adaptar el aprendizaje a cada alumno

Innovación educativa con videojuegos para adaptar el aprendizaje a cada alumno / Miguel Ángel Montesinos

Vivir una sociedad de pleno siglo XXI con una educación en muchos casos demasiado tradicional. Ese fue el horizonte que se encontraron Alejandro Llinares y Ernesto Buñuel, dos profesionales del ámbito de la ingeniería industrial, cuando se sumergieron en las aulas y se dieron cuenta de la dificultad de que los contenidos a aprender llegaran adaptados a cada alumno. Con ese reto en mente, en 2021 y bajo el ala de Lanzadera –la aceleradora de empresas impulsada por Juan Roig– fue cómo surgió Zynergic, una startup valenciana que, como explica Llinares -CEO de la firma–, se especializa en «en innovación educativa y tecnológica». La vía para ello, los videojuegos.

Mediante ellos y sus dinámicas exitosas, la empresa busca que los centros y sus profesionales logren mayores evidencias educativas, ofreciendo para ello «herramientas pedagógicas que permiten a los docentes hacer seguimiento de sus alumnos, detectar tendencias y entender así las fortalezas y debilidades de los estudiantes».

Esto se ha traducido ya en un producto como Eutopia, un proyecto para primaria y secundaria englobado bajo los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) que se basa en la creación de una metrópoli –cada alumno gestiona una aldea de la misma, que en paralelo interactúa con la del resto de compañeros– en la que se entrelazan la transmisión del contenido curricular de hasta ocho asignaturas con el cumplimiento de objetivos personalizados para cada estudiante para así «no dejar a nadie por el camino». Además, según explica Llinares, su fórmula permite tener «evidencias» de qué decisiones y competencias –el método de aprendizaje que se aplica actualmente en España- «presenta cada alumno». «Es un análisis completo del aprendizaje, con una visión más activa», enfatiza.

De momento, tras dos años en los que se han ido probando prototipos de la iniciativa, este próximo curso 2023-24 será el primero en el que el software de Zynergic cuente ya con clientes. «Ahora mismo tenemos cuatro centros, pero estamos intentando cerrar otros 12 más para este curso», destaca el CEO antes de añadir que el precio actual al que ofrecen el producto es de «35 euros al año por estudiante».

Con este contexto, la meta es llegar a mayo «multiplicando por cuatro los clientes», lo que implicaría empezar el curso 2024-25 «trabajando ya con 40 centros». Esto, en un momento en el que están ampliando su plantilla para tener ocho trabajadores, «nos daría una facturación interesante para poder llegar a ser rentables», un objetivo que Llinares marca para 2026-2027 si se logra acompañar estos ingresos con fondos institucionales y préstamos para innovar. No es este, sin embargo, el único horizonte de negocio que tiene contemplado. Entre las ideas está explorar el uso de sus herramientas en nichos de mayores ingresos «como las universidades, los centros de formación o las empresas», todo adaptándolo a cada entorno y sus necesidades.