Los alquileres de playa moderan los precios

Los propietarios de apartamentos en la costa que los ponen en alquiler han pisado este verano el freno y han moderado sus pretensiones económicas. Los intermediarios explican que los dueños de los inmuebles vacacionales son conscientes de la pérdida del poder adquisitivo de las familias por el incremento de la inflación y han fijado subidas en la Comunitat Valenciana que rondan el 3 %, una cifra muy lejana a la del 15 % que ha aumentado el alquiler tradicional. A nivel nacional, el incremento medio es del 3,75 %, por debajo del IPC actual, según datos de la tasadora Tecnitasa. El coste de alquilar un apartamento en la Comunitat Valenciana ronda los quinientos euros, aunque el precio se dispara en la Costa Blanca. De acuerdo a los datos de Tecnitasa, en Vinarós se pueden encontrar apartamentos de 70 metros cuadrados por 500 euros. En València hay oferta por 520 euros en las playas de El Saler y en Calp es posible contratar apartamentos por 525 euros a la semana.

La zona más cara para alquilar en verano

La zona valenciana más cara para veranear es Benidorm con apartamentos situados entre la primera y tercera línea de playa con un tamaño medio de 65 metros cuadrados que cuestan 1.465 euros por semana. Para las familias con presupuestos más ajustados, Tecnitasa precisa en su informe de precios que es posible pasar una semana de vacaciones en el paseo marítimo de Vinarós o en primera línea en Moncofa por 500 euros.

Eduardo Vercher, delegado de Tecnitasa que cubre el área entre Calp y Benifaraig, subraya que los propietarios se han contenido este año en sus exigencias ante el temor a perder clientes por la crisis económica. «La subida de los precios de la cesta de la compra y de la inflación en general ha restado poder adquisitivo a las familias españolas que alquilan apartamentos. Hemos detectado que hay ganas de alquilar apartamentos este verano, pero todavía queda mucha oferta disponible», asegura. Vercher incide en que el precio es muy similar al del año pasado.

«Muchos propietarios se quedaron sin poder alquilar el primer año de la pandemia por las restricciones y ahora son previsores y no han inflado los precios». El experto destaca que en Dénia, Oliva y Cullera hay oferta de apartamentos por 500 euros a la semana. «Las subidas de precios no son significativas y contrastan con las que sí se están produciendo en el alquiler tradicional, como se puede observar, por ejemplo, en Gandia», destaca Vercher. Los alquileres tradicionales han subido este año en Gandia un 14 %.

Óscar Ferrairó, propietario de la inmobiliaria Ferrairó en Gandia, apunta que esperan una temporada similar a la del año pasado «Todavía falta un mes para que arranque la temporada. Estamos preocupados porque no sabemos cómo va a afectar la convocatoria de elecciones. Hay clientes que no saben qué hacer por si los citan a una mesa electoral. Ya tenemos casos de familias que normalmente alquilan un mes y este verano están pensando en reservar dos o tres semanas», explica Ferreiró.

Por comunidades autónomas, las que más incrementan sus precios son las Islas Baleares y las Islas Canarias, que duplican la media nacional junto con Galicia y País Vasco. En Mallorca o en Marbella una semana de un apartamento sale por 3.000 euros. Los propietarios de Asturias y la Comunitat Valenciana suben el coste de sus alquileres en agosto entre un 3 % y un 6 %; mientras que los aumentos más moderados se registran en Murcia, Cantabria y Cataluña, con incrementos por debajo del 3 %.

Cataluña

Tencnitasa incide en que «sorprende» la evolución de los precios en el litoral catalán, donde el año pasado subieron a doble dígito y en este 2023 están con aumentos muy reducidos o planos. En línea contraria se sitúa la isla de Tenerife, que el año pasado estaba a la cola de los incrementos con poco más del 3 % de subida y este año duplica los aumentos.

Fernando García Marcos, director técnico de Tecnitasa, advierte: «Hay que tener muy en cuenta que el alquiler vacacional es un mercado mucho más volátil que el convencional, puesto que tanto el volumen, la calidad de la oferta y los precios varían a medida que el verano se acerca». Según Jose María Basáñez, presidente de Tecnitasa, «para esta temporada se constata una mayor antelación en la contratación de los alquileres a pie de playa, dada la alta demanda existente. Muchos veraneantes cierran su reserva con 6 meses de antelación para evitar problemas».

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