Elecciones 23J

¿Qué significa el voto en blanco y a quién favorece?

Existen diferencias profundas entre no acudir a votar y, pese a no optar por ninguna de las candidaturas, ir a depositar el sobre en la urna

¿Qué significa el voto en blanco y a quién favorece en las elecciones generales?

PI STUDIO

Redacción / Agencias

Aunque a muchos les parezca una decisión sencilla, hay muchos ciudadanos que están llamados a las urnas el próximo 23 de julio que no saben a quién van a votar. Y no es porque duden entre las dos opciones de la izquierda (Pedro Sánchez por el PSOE y Yolanda Díaz por Sumar) o entre las dos de la derecha (Alberto Núñez Feijóo por el Partido Popular y Santiago Abascal por Vox), es más bien porque no se sienten representados por ninguno de los partidos que concurren al Congreso y al Senado. En esos casos, parece que la solución más sencilla es no ir al colegio electoral. Pero hay muchos ciudadanos que se niegan a quedarse sin ejercer su derecho al voto por no haya un solo candidato que les represente. Para esos casos está la fórmula del voto en blanco.

Se considera voto blanco cuando dentro del sobre no hay nada. El ciudadano no ha elegido ninguna de las papeletas con las listas de los partidos que optan a escaños en la Cámara Baja. En el caso del Senado, ocurre también cuando, aunque esté la papeleta, esta no señala el nombre de ningún candidato a senador.

Tal y como establece la actual Ley Electoral, esta clase de voto se considera válido, por lo que se suma a los votos obtenidos por las diferentes candidaturas para hacer el reparto de escaños.

¿A quién beneficia?

Para saber a quién beneficia y perjudica el voto en blanco hay que tener muy presente la famosa ley d'Hondt, el sistema de cálculo proporcional utilizado en el sistema electoral español. Conforme a éste, en cada circunscripción se excluye primero a las candidaturas que no hayan obtenido, al menos, el tres por ciento de los votos válidos emitidos, por lo que al incluir los votos en blanco una candidatura necesita más votos para lograr escaño. Este porcentaje puede variar si las elecciones son generales o autonómicas, y en el caso de ser autonómicas, de en qué comunidad autónoma tengan lugar.

Para entender esto, es mejor utilizar un ejemplo: en una circunscripción imaginaria en la que ha habido 1.000 votos a candidaturas, 200 en blanco y 50 nulos, teniendo en cuenta sólo los votos a candidaturas un partido necesitaría 30 votos (el 3%) para conseguir un escaño, mientras que al tener en cuenta los votos en blanco requeriría 36 (el 3% de 1.200). 

Por lo tanto, en teoría, esta forma de voto desfavorecería a los partidos pequeños porque la misma ley d'Hondt les perjudica en las circunscripciones pequeñas. O lo que es lo mismo, los más beneficiados suelen ser PSOE y PP. Sin embargo, la realidad es que en muchas ocasiones ni beneficia ni perjudica porque no es común que los partidos se queden en el límite del tres por ciento de los votos.

¿Voto en blanco o voto nulo?

Hay que tener muy presente que el voto en blanco no tiene nada que ver con el voto nulo. Este se produce cuando se realiza con un sobre o papeleta diferente del oficial, o si dentro del sobre se incluye algún objeto o símbolo 'de más' (por ejemplo, cuando el sobre contiene más de una papeleta de dos candidaturas --si las dos son de la misma, se considera un voto válido--), tal y como se recoge en el Artículo 96 de la Ley Electoral.

Urnas preparadas en un colegio electoral, a 28 de mayo de 2023, en Madrid (España).

Urnas preparadas en un colegio electora antes del inicio de la votación del pasado 28 de mayo. / EP

En el escrutinio de cada cita electoral se difunden siempre noticias de que los presidentes de las mesas se encuentran dentro de los sobres lonchas de chorizo, pintadas de lo más variopintas en las papeletas o, incluso, papeletas diseñadas por uno mismo.

¿En qué se diferencia de la abstención?

La abstención es simplemente no ir a votar ni, lógicamente, introducir ningún voto. Al no haber voto, éste no se suma y no afecta a los resultados.

Sobre el significado de la abstención, en este caso es mucho más difuso, pues no se sabe por qué la persona no ha ido: si es por indiferencia, descontento con el sistema electoral, enfermedad...