El PP insta a PSPV y Compromís a no "aferrarse" al sillón y facilitar la investidura de Mazón

El síndic popular y director de campaña, Miguel Barrachina, considera injustificable que la C. Valenciana se convierta en el último territorio en renovar los cargos

El responsable de Economía, Rubén Ibáñez, define la política económica del Botànic como más deuda y déficit

Los dirigentes del PPCV Miguel Barrachina y Rubén Ibáñez, en rueda de prensa.

Los dirigentes del PPCV Miguel Barrachina y Rubén Ibáñez, en rueda de prensa. / Levante-EMV

El director de campaña del PPCV y síndic de esta formación en las Corts Valencianes, Miguel Barrachina, ha pedido de nuevo al PSPV y a Compromís que "dejen de aferrarse a unos sillones que ya no les corresponden por la voluntad de los valencianos" para permitir que se lleve a cabo lo antes posible la investidura como nuevo president de la Generalitat del popular, Carlos Mazón.

Barrachina ha hecho estas declaraciones tras la rueda de prensa conjunta con el responsable de Economía del grupo popular, Rubén Ibáñez, en la que se ha analizado la situación de las cuentas de la Generalitat.

"Cuanto antes se cumpla el deseo de los valencianos, mejor", ha manifestado en atención a los medios de comunicación Barrachina, quien ha hecho notar que, "probablemente", la Comunitat Valenciana "va a ser el último territorio de España en renovar los cargos y eso tiene poca justificación".

El representante del PP ha comentado que desde su partido siguen "urgiendo al PSOE y a Compromís para que constituyan sus grupos cuanto antes y que dejen de aferrarse a unos sillones que, por la opinión de los valencianos, no les corresponde ni a unos ni a otros".

Preguntado por su preferencia por el día de investidura, el parlamentario valenciano ha respondido que "para el Partido Popular, cuanto antes mejor".

Y ha insistido: "Tiene escasa justificación que veamos comunidades autónomas como Extremadura, que ya hay fechas para la celebración de plenos y que vayamos a ser, probablemente, por el deseo de Ximo Puig, el último territorio de España en el cual se renueven sus cargos". "Poca justificación, sobre todo en un territorio, en la Comunitat Valenciana, donde el proyecto que tiene Ximo Puig para este último mes es ninguno", ha rematado.

Inversiones

Tras las manifestaciones del president en funciones en las que aseguraba que desde el ámbito de Presidencia ya tienen elegidas a personas para interlocutar y que en estos momentos "hay muchas cosas en trámite, algunas de ellas son inversiones muy importantes", Barrachina ha asegurado que a los populares les gustaría reunirse y mantener encuentros "todos los días y que no se perdiese ninguna inversión en la Comunitat Valenciana por quebrantar contratos de confidencialidad con empresas multinacionales".

"València es la mejor tierra del mundo para invertir, antes y ahora. Y, por tanto, a lo que aspiramos es a que todo el mundo que tenía previsto venir a la Comunitat Valenciana lo haga y muchísimos otros que a partir de ahora tendrán la certeza de un gobierno que reducirá plazos, que no alargara con la burocracia y que les rebajará los impuestos", ha finalizado.

En la comparecencia para analizar las cuentas de la Generalitat, el responsable de economía del grupo popular, Rubén Ibáñez, ha asegurado que “Puig ha arruinado a la Comunitat Valenciana”. 

“La política económica de Puig es más deuda, más déficit y más impuestos. Esto es una realidad objetiva. Cada segundo que está Puig en la Generalitat aumentan los números rojos. Puig debe mirarse más al espejo y asimilar que ha perdido las elecciones y dejar de ser un okupa en el Palau”, ha añadido.

En concreto, Ibáñez ha señalado que “el boquete" que deja en 2022 asciende a 3.206 millones de euros y ha recordado que, en octubre de 2021, cuando se presentó el presupuesto de 2022, nos aseguraron que ese déficit sería cuatro veces menor de lo que al final ha sido. Las arcas públicas están más que tambaleándose, en serio peligro. Desde que Puig es presidente el déficit ha sido superior a 13.001 millones y la deuda ha aumentado 15.400 millones de euros más”.

“Al inicio de 2022 la tesorería empezó con 2.246 millones de euros, cuando acabó el año estaba en 462 millones, más del 79 % de pérdidas en tesorería. En abril de este año 2023, el estado de tesorería asciende a 160 millones mientras que cada mes la Generalitat necesita 600 millones de euros solo para pagar nóminas” ha afirmado.

Facturas en los cajones

Rubén Ibáñez ha continuado desgranando los números. “Puig dejó sin pagar 2.621 millones, de los que 1.280 millones pertenecían a ayudas, es decir, el 49 % de lo que se dejó sin pagar. Además, escondió en los cajones otros 1.263 M€ en facturas. Es decir, entre lo no pagado y lo escondido en los cajones, durante 2023 se tienen que pagar 3.884 millones de euros más”.

“En políticas sociales -ha continuado- la Generalitat ha dejado sin ejecutar 1.207 millones que iban destinados a educación, sanidad, vivienda e igualdad. Además, solo se ha ejecutado el 45% de lo presupuestado en inversiones. El conseller Arcadi España no nos dijo que la primera Conselleria en gasto había sido la de la deuda con 8.400 millones, mil millones más de lo que nos anunciaron”.

Concretamente, en sanidad solo se ha ejecutado el 27,3% del presupuesto, el 6,5% en igualdad, el 0,7% en vivienda, y el 17% en educación. Es decir, solo ha dedicado a políticas sociales el 50% del total del gasto de 2022. En este sentido Ibáñez ha resaltado que “es falso que la política social haya sido una línea a seguir en el Consell de Puig”. 

Además, el déficit ha aumentado, también la deuda y los impuestos se han disparado de una forma notable hasta 3.700 millones de euros más y los valencianos tenemos problemas para llegar a fin de mes. “Aquí el único que ha ganado ha sido Puig y los suyos. Las deudas del futuro van a lastrar a las nuevas generaciones”.

Rubén Ibáñez ha señalado que ese dinero no ha ido a políticas sociales “sino que se ha destinado al sector público que ha devorado el cien por cien de los recursos, y al boato de más consellerias y más personal. El Consell de Puig ha decidido que venga otro y lo pague, estrangulando el futuro de todos los valencianos. Ha sido un mal gestor. Tiene que haber un verdadero control de las cuentas públicas y Ximo Puig ha demostrado que ha habido una auténtica barra libre en el gasto. Debería salir ya del Palau y no atornillarse allí, dejar de comprometer gasto, aunque sabe que se tiene que ir de la Generalitat”.

Ibáñez ha afirmado que “las medidas de futuro son un control de las cuentas públicas, eficacia en el gasto público, poner cirugía en el sector público y bajada de impuestos. Queremos control y eficacia en las cuentas públicas”.