Debate en el Senado

Moreno celebra que Aragonès "normalice" que Cataluña vuelva a un foro con el resto de comunidades

El andaluz saluda "con optimismo" la decisión del presidente de la Generalitat de acudir a la Cámara Alta mientras que carga contra el "grave error" del PSOE de dejar la silla vacía en un debate sobre la amnistía convocado por el PP

Juanma Moreno.

Juanma Moreno. / EP

Isabel Morillo

El presidente de Andalucía, Juan Manuel Moreno, dio la bienvenida al catalán Pere Aragonès al Senado este jueves, en el debate convocado por el PP contra la amnistía, y celebró que el president de la Generalitat haya decidido acudir a una cita de la que se ausentarán los presidentes autonómicos del PSOE.

El barón andaluz del PP fue especialmente cuidadoso con el mensaje que lanzó al presidente de Cataluña, asegurando que saluda “con optimismo” su presencia en el Senado y valorando de forma muy positiva “el hecho de que Aragonès participe”. “Es algo muy importante”, consideró, una decisión que “normaliza que en los órganos de representación multilateral” esté presente Cataluña. Insistió además en que “en una democracia”, cada uno puede defender sus ideas políticas con total normalidad dentro de las instituciones, expresando su “respeto”.

Un tono que sorprende cuando el PP prepara el terreno para un debate que se prevé duro y bronco, después de que el propio Alberto Núñez Feijóo haya dado orden de convertir el Senado, donde los populares tienen mayoría, en una cámara de resistencia frente a un posible gobierno de Pedro Sánchez. La estrategia pasa por erosionar al máximo al PSOE ante una posible amnistía a los encausados en el procés, empezando por Carles Puigdemont, a cambio de los votos de Junts para una investidura.

Durante los momentos de mayor confrontación por el ‘procés’, el Ejecutivo catalán ha dejado su silla vacía en los órganos que sientan al Estado y las comunidades autónomas. La Generalitat se ha ausentado de foros multilaterales como el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) donde por ejemplo se debate la reforma del sistema de financiación autonómica o ha dudado sobre su presencia en la Conferencia de Presidentes, aunque en la última de Palma en 2022 sí que acudió. El hecho de que Aragonès haya decidido acudir a esta cita del jueves en la Comisión de las Comunidades Autónomas, promovida por los populares, es importante y supone un giro en la relación de Cataluña con el Estado y el resto de comunidades en este tipo de foros multilaterales.

Una decisión que además fue una sorpresa después de que el lehendakari Íñigo Urkullu anunciara que no iba a asistir, tampoco estará el Gobierno ni el resto de presidentes socialistas porque se ha interpretado desde el principio que este debate es una maniobra para desgastar a Pedro Sánchez por su negociación de la investidura con los partidos independentistas. Aragonès abrirá el debate con el resto de comunidades, ante la ausencia del Gobierno, y podrá hacerlo en catalán. Ya explicó la portavoz de la Generalitat, Patrícia Plaja, que no dejarán “nunca ningún espacio vacío para defender el fin de la represión", de la que creen que el PP es “uno de los principales responsables” por las decisiones adoptadas en 2017. Todos los presidentes autonómicos tendrán turno de palabra en lo que podría convertirse en un todos contra uno, al sentar a los 11 presidentes del PP frente al líder de ERC. Aragonès no tiene previsto quedarse a escuchar a los barones del PP, dará su discurso y se irá "por cuestiones de agenda".

El presidente andaluz, que compareció ante los medios tras una reunión con el alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, también del PP, insistió en la importancia de que el presidente de Cataluña asista a esa cita en la Cámara Alta. “Mañana tenemos una comisión claramente muy importante en el Senado, donde tenemos representación las comunidades autónomas”, recordó Moreno, una “convocatoria oportuna”, defendió, ante unas negociaciones para la investidura de Sánchez con los grupos independentistas y nacionalistas que consideró pone en riesgo en actual “modelo de equilibrio territorial” y genera “agravios entre territorios”. Moreno lleva semanas agitando el discurso del agravio y del peligro de que “Andalucía pague la factura” de los acuerdos que se lleguen, en negociaciones bilaterales con Cataluña.

Málaga acogerá otra manifestación

El barón del PP ha cogido la bandera que en otros momentos han ondeado los presidentes socialistas de Andalucía, advirtiendo de que la comunidad más poblada de España será “un muro de contención del privilegios” o garante de que no se rompa el equilibrio entre las autonomías. El dirigente andaluz acompañó a Feijóo el pasado 8 de octubre en Barcelona en la manifestación contra la amnistía convocada por Societat Civil Catalana y Málaga será escenario en las próximas semanas de otra gran manifestación del PP tras la de Madrid y Santiago de Compostela, tal y como ha confirmado Génova. Iba a ser este domingo pero ha quedado aplazada. Moreno ya avisó de que convocaría a los andaluces para salir a la calle.

“Saludo con optimismo el hecho de que Aragonès participe, es algo muy importante, que normaliza que en los órganos de representación multilateral esté presente Cataluña y presente sus ideas en democracia con total normalidad”, defendió el presidente de la Junta de Andalucía. Una noticia que quiso destacar “como positiva” para contrastarla con el hecho “negativo y no entendible” de que “Moncloa haya orden a los socialistas para que no participen en esa comisión, no tiene ningún sentido”, apuntó contra el PSOE. A su juicio, la ausencia de los presidentes socialistas es una orden que ha dado Pedro Sánchez que “devalúa a las instituciones” y hace “flaco favor al Senado y a las instituciones”. “Un grave error de Sánchez que demuestra el miedo a debatir entre cuestiones tan importantes”, apuntó.