PNV y Bildu se renuevan para competir por el Gobierno vasco

La política vasca encara la cita electoral del próximo año -aún sin fecha, aunque se espera para antes de las europeas de junio- con novedades relevantes: tanto el PNV como EH Bildu afrontan renovaciones de cara a unas elecciones que se auguran ajustadas para el triunfo y la posibilidad de gobernar. Así, los nacionalistas han anunciado por sorpresa el relevo del actual lehendakari, Iñigo Urkullu, como candidato, y los abertzales previsiblemente harán lo mismo hoy con Arnaldo Otegi, quien ya ha dejado entrever que no quiere presentarse a la carrera electoral.

El partido presidido por Andoni Ortuzar quiso escenificar ayer un relevo tranquilo una vez que la ejecutiva del PNV anunció el sábado que quien ha sido lehendakari durante los últimos doce años deberá ceder el testigo al actual diputado de Infraestructuras y Desarrollo Territorial de la Diputación Foral de Bizkaia, Imanol Pradales, quien se convertirá así en candidato a la Lehendakaritza. En el tradicional acto político en homenaje a su fundador Sabino Arana en Sukarrieta, esta vez con motivo del 120 aniversario de su fallecimiento, Urkullu y Pradales -que fue alumno suyo en la escuela-se fundieron en un abrazo ante las cámaras y la militancia. Ortuzar lamentó "filtraciones periodísticas que mezclan un poco de verdad con bastante de mentira" y subrayó que queda por delante un proceso "que desembocará allá por el 20 de enero en una ambiciosa propuesta de relevo generacional para garantizar que las instituciones vascas estén en manos rejuvenecidas".

Por su parte, el coordinador de EH Bildu, Arnaldo Otegi, no tiene previsto repetir como candidato a lehendakari, aunque está a la espera de que lo que decida la dirección de la formación soberanista, que este lunes se reúne para abordar esta cuestión. No obstante, sí volverá a postularse a liderar la coalición en su próximo congreso. Así lo dio a entender el líder de EH Bildu durante la última semana. De momento, han sonado como posibles aspirantes a la Lehendakaritza las parlamentarias Oihana Etxebarrieta y Nerea Kortajarena.

Estos movimientos responden a los cambios en el mapa electoral vasco que fueron evidentes en las recientes elecciones generales. El PNV necesita un relevo generacional capaz de atraer el voto joven que se lleva Bildu y la coalición abertzale necesita desembarazarse de la última gran figura que se vincula directamente a ETA. Ambos partidos se disputan además ser los socios preferentes del PSOE, tanto en Madrid como en Euskadi, ya que previsiblemente tendrá en sus manos la configuración del nuevo Gobierno vasco sin mayorías absolutas. En esta última legislatura, el apoyo socialista ha sido imprescindible para que pudiera gobernar Urkullu.