Cuando Rita Barberá y la fallera mayor de Valencia se encaramaron a lo alto de las torres de Serranos el pasado 22 de febrero seguramente no eran conscientes de que el evento destinado a servir como pistoletazo de salida a la edición 2015 de las fallas se iba a convertir en uno de los temas del momento. La alcaldesa acuñó la palabra «caloret» en un discurso de la «Crida» que aún es recordado por muchos y que estuvo marcado por su polémico uso de la lengua valenciana.

Dos semanas después, las empresas de souvenirs comercializan todo tipo de productos con el vocablo. Incluso el Ayuntamiento de Valencia ha repartido chapas con el tema «I love el caloret».

Y podría darse un nuevo paso: el registro de la palabra como marca comercial. De momento, la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM) ha recibido cinco solicitudes para legalizar la denominación «el caloret», referidas a productos tan diferentes como reclamos publicitarios, prendas de vestir o música digital descargable. Y podrían tramitarse más: la veda ya se ha abierto.

La primera petición se realizó dos días después de la «Crida» a través de Internet. Se refiere al uso de la denominación «el caloret» en «publicidad, reclamos publicitarios y merchandising»; entre otros.

Ese mismo día „y con menos de dos horas de diferencia„ una firma de artes gráficas solicitó la licencia de la misma marca para «prendas de vestir, calzado y artículos de sombrerería». Fueron los pioneros, el camino estaba trazado.

El 25 de febrero se presentó un escrito para utilizar la marca en «cervezas, aguas minerales y otras bebidas sin alcohol», que iba acompañada por otra solicitud para la gestión del signo distintivo en bebidas alcohólicas. Un día después, se repitió la solicitud para bebidas espirituosas, acompañándola esta vez con un logo en letras amarillas sobre fondo negro.

Por último, el 27 de febrero una discográfica tramitó una solicitud para utilizar la denominación en «música digital descargable, discos, cd's, programas de radio y televisión para los festivales de música, etc». Durante la última semana no se ha registrado ninguna petición nueva.

Asociada a la alcaldesa

Los cinco tramites se formalizaron vía Internet tras el pago de una tasa. Aún falta mucho para que sean aprobados. Ángel Renero, director de la oficina en Valencia de la firma especializada Isern Patentes y Marcas, explicó ayer a Levante-EMV que «lo que ha ocurrido es que se han recibido las solicitudes. Ahora puede pasar dos cosas: que sean denegadas o que la tramitación siga su camino y entre en un plazo de alegaciones. Yo creo que ocurrirá lo primero, pero la OEPM será quién decida».

Las solicitudes se datan en fecha y hora para poder determinar la prioridad de las mismas: si dos coinciden y son aprobadas siempre prevalece la primera, pudiéndose reclamar incluso cantidades económicas por su uso. Renero comentó que «no creo que en este caso ocurra así, la palabra 'caloret' ha registrado cierta notoriedad y se asocia claramente a las fallas y a la figura de Rita Barberá. Creo que, por estas razones, las peticiones serán declinadas. Ella es quién tiene los derechos más claros sobre la marca, otra cosa será que decida ejercerlos».

Barberá rehusó esta semana litigar por el registro y apuntó que, de serlo, sería su familia la que entrara en un tema que «de momento, no hemos debatido».

Renero recordó que ya han ocurrido situaciones similares con términos como «pequeño Nicolás» o la «Pechotes»: «Son palabras que se hacen populares al utilizarse para definir un personaje y a alguien se le ocurre registrar la marca de la noche a la mañana, tal y cómo ha ocurrido con 'caloret'. Eso no te da derecho a tener una marca».