Para una comisión modesta, tener una preseleccionada es motivo de alegría. Y como sea elegida «¡no sé que puede pasar!. Si ya hubo pancartas, globos... estoy convencida que serviría para levantar la comisión. Ayudaría sin duda». Es el caso del Grupo Antonio Rueda, comisión que el día menos pensado igual tiene que cambiar su nombre por mor de la Memoria Histórica. «Algo se ha dicho ya». Y que tiene en Alicia Alegre su baza y su ilusión. Es fallera de toda la vida y, por consiguiente, una superviviente en una comisión que venía como un tiro, pero a la que las divisiones les pasó factura. «Hemos vivido épocas espectaculares pero la verdad es que tuvimos un bajón. Pero yo me quedé y estoy orgullosa de ser de mi comisión de siempre».

Y en su caso, más, porque está muy metida en la vida de la falla. «Al ser menos, es más fácil ponernos de acuerdo. Y reconozco que muchas veces se dice que "Si lo dice Alicia, adelante". Soy muy feliz y también me gusta entregarme. He estado en festejos, infantiles... y siempre he sido la presentadora. De la proclamación, de la presentacion... la del micrófono». La elección ya la vivió cerca el año pasado porque su prima hermana estuvo entre las 72 finalistas. «vivimos las mismas ilusiones de este año y no dejamos de soñar en conseguirlo».

Trabaja en los medios de comunicación. «He acabado periodismo y me falta el proyecto». Pero, de momento ya se ha hecho un hueco en una televisión local. «Tuve la opción de hacer prácticas y la cogí. Y aunque es un trabajo voluntario, me encanta. Ya hago salidas y cada día veo que me encanta».

Pero no sólo eso: tambien trabaja en la recepción y administración de Aimplas (Instituto Técnico del Plástico) y es azafata en Mestalla. Muchas experiencias en sus 22 primeros años. Pero ahora sueña con su gran noticia a finales de septiembre.