aspecto inusual. Si algo caracteriza a la elección de las falleras mayores de València es el ambiente especial que se respira en el hemiciclo municipal en el momento de leerse las actas. Sin embargo, las restricciones todavía vigentes robaron a la fuerza esa emoción tan especial de una «casa de la vila» a rebosar. Apenas los jurados, la directiva, algo de prensa y un par de representantes de cada comisión con candidata pudieron estar presentes.