P. Varea, Valencia

La falla Avenida de Burjasso-Padre Carbonell fue la primera que llevó el conflicto a la Federación de Fallas de Especial cuando en noviembre del 2004 el grupo socialista denunció irregularidades en la facturación de la iluminación de las fallas de ese año. Meses después se suman los dobles contratos en infantil y la presunta falsificación de la firma del artista fallero José Antonio Santaeulalia, que el área de Fiestas lleva adelante por las diligencias de la Junta Central Fallera.

La Merced fue la segunda en llevar otra polémica y por el mismo motivo: una irregularidad en la factura de la justificación de la subvención del monumento que, también, desvelaron los socialistas. En la Merced su presidente dimitió.

La organización que agrupa a las federadas se reunirá el próximo martes, después de aplazar la de ayer ante la ausencia de representantes de Benicalap, y espera que «está falla encuentre el camino para defenderse y salir airosa en las instancias judiciales, si finalmente el fiscal admite a trámite de la documentación oficial».

Lo que parece muy evidente es la expulsión de Benicalap de la federación ante el cumulo de presuntas irregularidades y otras anomalías en un caso muy diferente al de la Merced, que la abandonó hasta resolverse su situación.

Cabe recordar que la federación defendió a capa y espada a Benicalap en los momentos iniciales de las denuncias y pidió tiempo hasta la resolución del expediente de área de Fiestas.

La organización constituída hace unos años ante estos hechos tiene una imagen tocada que si quiere recuperar deberán trabajar unidos y a fondo, a no ser que salgan más anomalías de otras comisiones porque cabe recordar que el área de Fiestas investiga desde hace unas semanas a pies juntillas las facturas de las fallas entregadas para justificar la documentación.

«El PP nos llamó mentirosos»

El PSPV recordó que el PP les acusó de«mentir» cuando denunciaron irregularidades en la falla Benicalap e incluso dijo que ibamos contra las fallas. «Hemos llegado a una situación lamentable por una gestión nefasta y un silencio cómplice de Barberá», explicó el edil socialista.

Carsí comentó que: «a la alcaldesa lo único que le importa es mantenerse en el poder aun a costa de la honorabilidad de la máxima institución de la ciudad. Ella no puede cerrar los ojos pero guarda silencio y calla ante las neglicencias del concejal popular Crespo ante su mala gestión».

Desde el área de Fiestas en las últimas semanas se ha lamentado la escasa colaboración de los socialistas con ellos.