Entrevista | Justo Herrera Gómez Vicerrector de Economía e Infraestructuras Universitat de València.

«La UV es el primer destino de Europa en programas de movilidad»

El vicerrector de Economía e Infraestructuras de la Universitat de València, Justo Herrera, aborda las redes de transporte en el ámbito universitario y económico valenciano

Justo Herrera, vicerrector de Economía e Infraestructuras de la Universitat de València.

Justo Herrera, vicerrector de Economía e Infraestructuras de la Universitat de València. / Germán Caballero

Sara García

Sara García

La Universitat de València forma parte del consejo local creado por 17 entidades representativas de la sociedad valenciana, liderado por Levante-EMV, en el contexto del I Foro Económico y Social del Mediterráneo

Según comentó en el foro, la Universitat de València es la que más estudiantes erasmus mueve. ¿Se necesitan mejoras en las infraestructuras de movilidad para adaptarse al crecimiento del alumnado universitario internacional?

La Universitat de València es el primer destino de Europa en recepción de estudiantes Erasmus y programas de movilidad (con más de 2.500 estudiantes cada año). Si a estos datos se añaden los de las otras universidades, estamos hablando de una movilidad muy importante de personas. A eso, hay que unir la movilidad que se produce vinculada a la dimensión científica de las universidades (estancias de investigadores, organización de congresos y encuentros científicos de todo tipo, …). Todo ello convierte a las universidades y al sistema universitario en un beneficiario muy importante de las posibles mejoras en las infraestructuras de comunicación. La conexión terrestre con Europa de la Comunitat Valenciana se produce a través del eje mediterráneo. Y la primera fase que nos afecta de dicho eje es la que conecta dos regiones, como Cataluña y la Comunitat Valenciana, mal comunicadas durante décadas, y no sólo desde la opción ferroviaria. En la actualidad las deficientes infraestructuras suponen problemas de movilidad de personas y de mercancías en el tramo (València-Cataluña), con las consecuentes ineficiencias económicas y medioambientales.

El territorio valenciano todavía requiere de una mayor vertebración desde la perspectiva de la movilidad de la población. ¿Qué retos plantea el sector de las universidades en cuanto a la movilidad?

La red ferroviaria debe permitir a los estudiantes, y a la comunidad universitaria en general, una movilidad ferroviaria combinada con transporte metropolitano eficiente para el acceso diario a los centros. Es una realidad la saturación de las redes viarias de acceso a la ciudad de València en horas punta. Pero, además, las redes de comunicación vertebradora son claves para el mantenimiento de comarcas con elevado potencial económico y social. Sirva como ejemplo el caso de nuestro campus de Ontinyent, al que casi 800 estudiantes y 300 profesores se tienen que desplazar cada curso haciendo uso forzado del vehículo particular ante las graves carencias en el transporte público.

¿Cómo pueden crecer las redes de movilidad de forma sostenible?

El crecimiento de infraestructuras de puertos y aeropuertos debe ser compatible con un crecimiento sostenible que garantice la preservación de nuestros ecosistemas. Los estudios de impacto ambiental no son sólo un trámite administrativo, son la llave para un desarrollo económico sostenible.

¿Qué beneficios aportaría el corredor mediterráneo a las universidades?

Un sistema universitario altamente internacionalizado estará muy afectado por las oportunidades de comunicación que afectan a la movilidad de personas. Pero también se debe resaltar la aportación que hacen las universidades públicas al desarrollo económico y social de un territorio. El desarrollo de las universidades es un factor clave, desde la perspectiva de equipamientos de conocimiento, tanto formativos como de investigación, que permitan a las empresas la colaboración con el sistema universitario en la atención a sus necesidades de Recursos Humanos y de I+D+i.

¿Cómo afectaría el corredor mediterráneo a la economía valenciana?

El corredor mediterráneo debe potenciar el mercado europeo y asiático. La solución del corredor mediterráneo supone una gran oportunidad en el transporte de mercancías y en la movilidad de personas en media y corta distancia, sin embargo, se encuentra con el hecho de que, en un mundo global, la atracción de empresas globales requiere comunicación aérea que, de no estar al nivel, puede afectar negativamente a los efectos de las expectativas puestas sobre el corredor. Los aeropuertos de la Comunitat Valenciana no se encuentran suficientemente dimensionados para atender el volumen de vuelos necesarios para responder a todas las necesidades de movilidad de personas en conexiones internacionales, por lo que su potencial se debe explotar más y mejor.

En un contexto geopolítico complicado, ¿peligra la financiación europea del corredor?

La situación geopolítica a nivel mundial, incluso dentro del propio continente europeo no puede ser más preocupante. En el marco territorial más amplio del proyecto (el Mediterráneo y Europa), los conflictos armados, y en especial la guerra en Ucrania, pero también el crecimiento en Europa de corrientes políticas que están en las antípodas de la visión de Europa con la que nació la UE, resultan tremendamente amenazantes.

La guerra en Ucrania está teniendo un impacto en el marco macroeconómico europeo, que empezó con la incidencia en los costes energéticos durante los primeros meses tras la invasión rusa, y en estos momentos ya supone una amenaza sobre las previsiones expansivas de la Economía Europea que prometían los fondos Next Generation EU. Ya se están produciendo demanda de recursos presupuestarios de la UE para atender las consecuencias de la guerra, pero el mayor impacto vendrá cuando finalice el conflicto y se tengan que atender los gastos de reconstrucción de un país absolutamente devastado.