El gobierno local de Torrent ha logrado un acuerdo con la UTE que construyó el aparcamiento Juan Carlos I, en la entrada sur de la ciudad, y que tenía que explotarlo, por el que recuperará la propiedad y la gestión por 3,7 millones de euros, que se abonarán en varios plazos. La firma cerró el servicio al poco tiempo de abrirlo y en la pugna judicial para esclarecer quien tenía la responsabilidad en la rescisión del contrato, un tribunal condenó al consistorio, al considerar que había causado la quiebra.
En el proceso judicial, la empresa valoró la obra realizada en cinco millones de euros. Con todo, en el proceso de negociación ha aceptado cobrar 3,7 millones, que se pagarán en varios plazos. El primero, de 820.000 euros, se abonará en 2015 y «ya está consignado en los presupuestos municipales», explicó ayer el concejal de Hacienda Jorge Planells. El resto se pagará a partir de 2016 y todavía no se ha cerrado si será en uno o varios plazos.
El acuerdo se aprobará la semana próxima en la Junta de Gobierno y se espera firmarlo en pocos días con la UTE. En el momento de rubricarlo, el Ayuntamiento de Torrent pagará el primer plazo y se convertirá en propietario de la infraestructura.
Planells explica que la intención del gobierno local popular es «reabrirlo de inmediato y ofrecer a los vecinos y los usuarios precios muy populares en los primeros tiempos, para darlo a conocer, generar confianza en ellos y proporcionar un servicio». Con este acuerdo se pondría fin a la vía judicial ya que, si bien la UTE ha ganado en primeria instancia, cabía la posibilidad de recurrir, lo que genera inseguridad jurídica y alarga en el tiempo el acceso al aparcamiento para ponerlo en marcha y «que los vecinos que sufrieron la obra puedan utilizarlo».
El concejal de Movilidad, santiago Miquel, que ha participado con Planells y con la edila Marisa Martínez en la negociación, valora que se haya logrado rebajar un 20% el precio porque «si el consistorio tuviera que construirlo ahora, nos costaría mucho más».
El edil recuerda que este aparcamiento es el único del área metropolitana que está «directamente conectado a una estación de metro, la de Avinguda, lo que permite el acceso sin tener que salir a la superficie». De ahí que negocie ahora con Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana bonificaciones para los usuarios o incluso alguna tarifa integrada.
Tanto Planells como Miquel esgrimen que la «buena gestión económica municipal» ha permitido rebajar la deuda y ahora afrontar este pago. Con todo, creen que toda la problemática que ha generado el proyecto «se debe a la adjudicación que hizo el PSOE».
