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De brazos cruzados en el Centro Especial de Empleo de Moncada a la espera del ERE

Los 53 empleados llevan una semana sin poder trabajar tras ser retirada la maquinaria

De brazos cruzados en el Centro Especial de Empleo de Moncada a la espera del ERE

Los 53 empleados y empleadas del Centro Especial de Moncada, 46 de ellos con alguna discapacidad, denuncian que todas las mañanas acuden a su puesto de trabajo a las 6.00 horas de la mañana a no hacer nada. Hace una semana la empresa proveedora de maquinaria envió un correo avisando que, tras el anuncio del ERE de extinción de este centro por parte del consejo de administración de la empresa municipal Pemsa de Moncada, iba a proceder a retirar la maquinaria duplicada que había en el centro, «pero cuando vinieron aquí los operarios, se llevaron todas las máquinas», asegura el presidente del Comité de Empresa del CEE.

Ante la imposibilidad de poder trabajar, y después de que nadie por parte del ayuntamiento les notificara los pasos a seguir, el representante de los trabajadores del centro decidió personarse en el consistorio para pedir que, al menos, les permitiesen hacer uso de las vacaciones hasta que se resolviera el expediente, «pero todos me remitieron al abogado encargado del concurso de acreedores y hasta mañana „hoy„ no ha podido atendernos», explica.

Trabajadores a los que además se les adeuda tres meses de salario, algunos incluso cuatro nóminas.

«Gran falta de sensibilidad»

El sindicato CC OO considera lamentable esta situación y que demuestra una «gran falta de sensibilidad» por parte del ayuntamiento de Moncada, «ya que son personas que no logran entender porqué no pueden trabajar y que se están levantando todos los días a las 5 de la madrugada para estar de brazos cruzados».

Desde CC OO confían en que se busque una pronta solución a la situación de estos trabajadores. No están de acuerdo con el ERE de extinción aprobado por el consejo de administración de Pemsa, y siguen defendiendo que el ayuntamiento asuma los 100.000 euros de deuda con Hacienda, que impiden que este centro especial de trabajo sea adquirido por otra empresa, lo que permitiría que los trabajadores mantuvieran su puesto. El consistorio, sin embargo, defiende que no pueden sufragar esa deuda por el plan de viabilidad impuesto por el Ministerio de Hacienda.

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