El grupo municipal del PP de Bonrepòs i Mirambell ha hecho público un comunicado en el que denuncia que la concejala de Compromís y vicepresidenta de la diputación, María José Amigó, les reprochó en público su participación en la procesión del Corpus Christi del domingo (pese a que un acuerdo del pleno lo prohibe) cuando el día anterior los cinco ediles populares se negaron a asistir al pleno de investidura de la nueva alcaldesa Rosella Antolí.
«Cuando pasábamos por la calle Mayor, María José Amigó, y la concejala de Compromís Rosabel Bolaños no han dudado en reprocharnos públicamente y en voz alta nuestra asistencia a la procesión, diciéndonos de viva voz: a esto sí, caraduras, pero a vuestra obligación de ayer no», relatan los populares en su escrito.
«Estamos orgullosos de haber cumplido con nuestra obligación, y si no nos tienen ustedes el mas mínimo respeto a los concejales del PP, como mínimo ténganselo a las personas que iban en la procesión y les han escuchado increparnos, y también ténganselo a la custodia que hoy salía en la procesión del Corpus», señala el PP en su nota, en la que acusan también a Amigó de haberles grabado con el teléfono móvil mientras procesionaban.
María José Amigó reconoció ayer los reproches lanzados a los concejales del PP e incluso los justificó, pero negó el tono de los mismos y varios detalles de su relato. Explicaba ayer la concejala y vicepresidenta provincial que los hechos sucedieron cuando pasaba la procesión ante la vivienda de su madre, y que fue esta la primera que se dirigió a los ediles populares para indicarles que «primero estaba la obligación y después la devoción», en referencia a que no hubiesen asistido al pleno de investidura como ediles que son de la corporación, y en cambio sí hubiesen ido al acto religioso.
Comenta Amigó que a continuación tanto su compañera Rosabel Bolaños como «posiblemente» ella reprendiesen también a los populares su asistencia a la procesión pese a la resolución del pleno. «Pero no les llamamos caraduras ni les insultamos», aseguraba ayer la edila, que también negó haber grabado a los concejales de la oposición con el móvil. «Les hice una foto para compararlas con las del día del pleno en las que no están, pero vídeo no hay ninguno», aseguró Amigó.
Cabe recordar que en 1983 la corporación acordó que los ediles no presidieran las procesiones pero que en 2011, poco después de que el PP llegase al gobierno, el alcalde Fernando Traver presidió la procesión del Corpor Christi y después revocó el acuerdo del 83, que el ayuntamiento volvió a recuperar en 2015 cuando PSPV y Compromís llegaron al poder.
