El Ayuntamiento de Torrent emitió un comunicado de respuesta a las acusaciones de La Rabosa, defendiendo que actuó para «evitar una acción legal de oficio que pudiera perjudicar al club motero», ante la advertencia de la Dirección General de Igualdad. Así, aseguran que «no exisitía intención alguna de censura» desde el consistorio y que solo se exigió «mayor responsabilidad» y que la cancelación fue «una decisión unilateral» de la organización. Revelan que se planteó hacer un comunicado conjunto que nunca se produjo y se mantienen abiertos a que se realice la concentración motera «y reducir los posibles perjuicios».