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Proyecto

Alfafar reenfoca l´Alqueria del Pi como centro medioambiental para lograr fondos Feder

El ayuntamiento se ve obligado a modificar el uso del edificio del siglo XVI tras quedar fuera de los Dusi por tercera vez

La casa señorial del siglo XVI, de muros de tapial valenciano, fue declarada Bien de Relevancia Local.

Renovarse o morir, es un poco el lema que ha hecho suyo el Ayuntamiento de Alfafar que siempre ha tenido entre sus prioridades de gobierno rehabilitar l´Alqueria del Pi, edificación del siglo XVI, declarada Bien de Relevancia Local. La rehabilitación de esta edificación y su conversión en un centro cultural y asistencial para el disfrute de todos los vecinos y vecinas del municipio era el punto estrella dentro de su Plan de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrador que optaba a a los fondos europeos de estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible (DUSI). Sin embargo, tras conocer este pasado lunes que se quedaba fuera por tercera vez consecutiva -Alfafar es el único consistorio de l´Horta que se ha presentado a las tres convocatorias- ha decidido optar a otras ayudas europeas, en este caso los fondos destinados a promover el desarrollo del turismo cultural sostenible e inclusivo, potenciando la vinculación entre la naturaleza y el patrimonio cultural.

Esto ha obligado al gobierno popular encabezado por Juan Ramón Adsuara a reenfocar el uso de l´Alqueria del Pi convirtiéndola en un centro de interpretación del arroz y turismo cultural de Alfafar. El proyecto que supera el millón de euros, estará financiado en un 60% por el consistorio -el ayuntamiento en pleno aprobó habilitar si procede una partida presupuestaria por importe total de 585.455 euros -,mientras que un 40% estará subvencionado con fondos europeos.

El proyecto presentado incluye la rehabilitación de la casa señorial y parte de la alquería en un centro donde se lleven a cabo programas de información, divulgación, interpretación del patrimonio y educación ambiental, que comprenden líneas de trabajo dirigidas a los centros educativos, a la población local y al turismo. «La propuesta incluye establecer una oficina municipal donde se ofrezcan las rutas culturales por la huerta en bicicleta que ya tenemos, diversidad de excursiones, enseñar el cultivo y uso del arroz,y no solo con objetivos turísticos sino también de enseñanza, ya que se promoverá las visitas escolares», señala Encarna Muñoz, primera teniente alcalde de Alfafar. En ese sentido otras de las propuestas es establecer un museo permanente del arroz y del entorno donde se cultiva, el Parc Natural de l´Albufera. «El proyecto aún está abierto, los diferentes grupos políticos también han presentado propuestas interesantes y si se nos concede la subvención ya concretaremos», remarca la concejala.

Hallazgos arqueológicos

En abril de 2016, ante el riesgo de derrumbe del edificio, el Ayuntamiento de Alfafar realizó unas obras para asegurar la estructura apuntalando el porche lateral y las caballerizas. Durante estos trabajos se realizaron unas catas arqueológicas que sacaron a la luz restos de elementos constructivos que podrían formar parte de un asentamiento agrícola anterior a la masía, corroborando la larga tradición agrícola del municipio.

En la vivienda señorial, que se rehabilitará como centro de interpretación del arroz, se conservan todavía restos de decoración clasicista, a modo de cenefas, en las bóvedas del entrevigado y restos de azulejos del siglo XVIII en la escalera. Unos elementos que se pondrán en valor también e la rehabilitación de este edificio.

Adsuara: «Estoy decepcionado con la puntuación»

El alcalde de Alfafar, Juan Antonio Adsuara, recibió como un jarro de agua fría la noticia de que el proyecto que optaba a los fondos europeos de Estrategias de Desarrollo Urbano Sostenible (DUSI) había sido rechazado por tercera vez consecutiva. «Habíamos cambiado de asesoramiento, todos los informes eran positivos y la verdad es que estoy muy decepcionado», señala.

Ahora solo le queda esperar a que se resuelva el contencioso administrativo contra el Gobierno por puntuar de forma errónea el proyecto en la segunda convocatoria o que Europa retire los fondos a ciertas localidades que no han cumplido con la ejecución de obras obligatoria el primer año por ser consistorios endeudados.

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