El documento inicial estratégico y el plan de reforma integral de la Font Baixa propuesta por la Agrupación de Interés Urbanístico de esta zona que pretende realizar un PAI de 36 bloques con más de 1.000 viviendas ya ha iniciado su tramitación oficial al ser publicado en el Documento Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV) tras aprobarse en el pleno de abril. Allí estará a exposición pública duante 30 días, tiempo en el que se pueden presentar alegaciones.

Son dos las formaciones que han confirmado que lo harán. Por una parte, Compromís, quien ha interpuesto un recurso contencioso administrativo contra el Consell por no incluir esta pastilla de huerta interurbana y la de la zona de l'Orba dentro del PATH de l'Horta.

La formación valenianista liderada por la candidata Amalia Esquerdo, considera que se debe cambiar la condición de suelo urbano establecido en el PGOU en los 90. Algo que, defienden, «sepuede hacer sin la obligación de grandes indemnizaciones a los agente surbanizadores tal y como defendió el ayuntamiento, ya que Informes de la abogacía general de la Generalitat Valenciana y diferente jurisprudencia han negado el derecho a la indemnización cuando no existe ni ordenación pormenorizada ni PAI aprobado, situación en la que se encuentra la huerta urbana de la Font Baixa y l'Orba».

Asimismo, desde Compromís per Alfafar «planteamos una infraestructura verde que favorezca la conectividad territorial entre los pueblos de la comarca y la calidad de vida de los ciudadanos de Alfafar» , y «estamos en contra de de proyectos tan incongruentes e insostenibles como el que ha aprobado el actual gobierno con fines especulativos».

Un proyecto participativo

Las alegaciones que presentará el PSPV van en otra dirección, Si bien los socialistas, y así lo apoyaron cuando estaban en el gobierno, sí que considera que se trata de una zona degradada que debe urbanizarse, no están de acuerdo con el modelo urbanístico presentado por la AIU y consideran que debe consensuarse con los vecinos. «

Se trata de un proyecto especulativo que no ha contado con la participación de los vecinos y vecinas, que atenta contra la estética y no tiene en cuenta las dotaciones ni un verdadero proyecto de zona verde», defiende la candidata, Noelia García.