El Ayuntamiento de Albal construyó en 2009 un cuartel de la Guardia Civil con sus recursos para que el Gobierno desdoblara el que existe en Alfafar, y ampliara la dotación de toda el área de la comandancia. Pero 10 años después, el edificio sigue cerrado. Así lo recordó ayer el alcalde de Albal, Ramón Marí, en el día de la Guardia Civil, que este año acogió la población. El mandatario insistió en que el edificio tiene «capacidad para 30 agentes, pero sigue vacío» aunque en 2009 hubo un compromiso de la «dirección de Madrid». «Vamos a seguir luchando por él», advirtió.

Albal acogió la fiesta, a la que se sumó el jefe de la comandancia de Paiporta, única que no tuvo celebración, como adelantó Levante-EMV. Además de los representantes políticos del área de Alfafar, al acto asistieron el alcalde de Picanya, Josep Almenar, y el líder de la oposición de Paiporta, Vicente Ibor, pero la Guardia Civil no invitó ni la alcaldesa de Paiporta, Isabel Martín (Compromís) ni el edil de Seguridad Ciudadana, Vicent Ciscar (PSPV).