Representantes de diversos colectivos que se oponen al Plan General de Ordenación Urbana de Alboraia celebraron una asamblea vecinal con la asistencia de unas 300 personas en la que se reclamando la retirada del proyecto y la apertura de un proceso efectivo de participación.
Per l'Horta, primera entidad en intervenir, denunció «el fraude que supone utilizar documentación desfasada» para elaborar el plan como «una memoria informativa del año 2011, datos de crecimiento demográfico carentes de rigor».
Por su parte, el AAVV Cívica y Vecinal de Port Saplaya criticó que el plan es «manifiestamente ilegal, puesto que pretende dar cobertura a una irregular modificación del PGOU vigente anulada por el TSJCV en 2002». Además, la entidad considera que el proyecto de edificación de 865 viviendas nuevas junto al parking del hipermercado supone «disparar la densidad residencial de una zona que ya presenta una clara saturación y que está encuentra encajonada entre el mar y la V-21». La entidad insistió en que el proyecto agravará «la carencia de dotaciones y «pondrá en peligro» la continuidad del hipermercado. La alternativa que plantea la asociación pasaría para destinar parte de los terrenos de la superficie comercial a las dotaciones que el núcleo residencial de Port Saplaya necesita.
Por otro lado, la Asociación Vecinal del Centro Histórico denunció la «carencia de claridad y de un criterio homogéneo» a la hora de delimitar el casco antiguo tradicional, así como «la arbitrariedad en la catalogación de las viviendas de protección oficial».
También los labradores afectados por la ampliación del polígono han constituido la plataforma «Més Horta, Menys Formigó» que también participó. La plataforma denuncia el estado de abandono y deterioro del polígono.
