El Ayuntamiento de Bonrepòs i Mirambell, que gestiona el único municipio confinado en l’Horta Nord, acaba de culminar su convocatoria de ayudas a bares y restaurantes, que lanzó antes de que se acordara el cierre para dar apoyo al sectir. Según la alcalcdesa raquel Ramiro, se van a adjudicar subvenciones de 400 euros a los ocho locales de hostelería que hay en la población. Además y ante la demanda de otro sector, el consistorio va a lanzar una convocatoria especial para peluquerías y salones de belleza, que registran una bajada de facturación al no poder acceder a ellos en unas semanas clientela de otros municipios, por el confinamiento.