El boxeador amateur valenciano Héctor González Navarro, de Godella, ingresó el viernes en la unidad de cuidados intensivos (UCI) del Hospital General de Castelló, después de sufrir un KO en el combate que le había enfrentado a Efrén Besalduch en el pabellón Ciutat de Castelló. Al cierre de esta edición, el púgil se encontraba en estado muy grave, en coma inducido, según las fuentes consultadas.

La velada se celebró en el Ciutat de Castelló. Cuando se disputaba el segundo asalto, González recibió una rápida combinación de golpes por parte de su adversario tras la que primero se tambaleó y, con posterioridad, cayó al suelo, según testigos presenciales. De inmediato entraron las asistencias sanitarias al ring y se llevaron al púgil en una ambulancia, que lo trasladó al Hospital General, donde ha permanecido ingresado las dos últimas noches.

Amplia representación de clubs de la provincia

El combate entre González y Besalduch era uno de los 20 de boxeo olímpico programados, tanto masculinos como femeninos, para una intensa cita que arrancaba a las 18.00 horas y tenía previsto concluir hacia la medianoche. Participaban representantes de varios clubs de la provincia (Fitness One de Benicarló, Mancebo de Vila-real, CB Vila-real, La Unión de Castellón, Domadores de Castellón o Equality de Castellón), así como de varias entidades de la provincia de Valencia. González Navarro pertenece al Club Boxeo Moncada, tiene 24 años de edad y competía en la categoría élite englobada en -64 kilos.

Un lance del combate

Mediterráneo contactó con Leopoldo Bonías, presidente de la Federación de Boxeo de la Comunidad Valenciana (agrupa a alrededor de 800 deportistas federados), presente en la velada del Ciutat de Castelló y quien asistió a la familia del púgil en las primeras horas posteriores al percance.

Según Bonías, se trató de un accidente. «Todo transcurrió con normalidad, fue un lance del combate: un boxeador que recibe un KO y que no se recupera», explicó. El dirigente explicó también que «todo estaba en regla». «Héctor tenía su licencia federativa, había pasado un reconocimiento médico y tenía el seguro médico», ahondó. «Fue una situación excepcional, no fruto de la vulneración de alguna norma o una imprudencia», remarcó.