“Alguien ha empezado muy bien la semana”. Fue uno de los comentarios que este martes a primera hora de la mañana, en el quiosco Salvi de Burjassot, se escucharon cuando la clientela vio a un operario de la sociedad de Loterías y Apuestas del Estado colgar un cartel de “gran premio” en las paredes del establecimiento comercial. “No es la primera vez que sucede”, les dijo la dueña de la tienda, Patricia Salvi, mientras accionaba “la máquina de la suerte”. El local también comenzaba bien la semana ya que su trabajo y deseo, entre otros menesteres, es “expedir el mayor número de papeletas que tengan premio”.
El quiosco Salvi validó un boleto de la Bonoloto, correspondiente al sorteo del lunes día 23, premiado con 153.085 euros. Tal como explicó Patricia Salvi a Levante-EMV, se trata de la “única apuesta agraciada en toda España en la segunda categoría del sorteo”, es decir cinco números acertados más el complementario. “No ha habido acertantes en la primera categoría.” Sobra decir que la dueña del quiosco desconoce la persona o personas agraciadas con la apuesta. “Hasta el momento nadie ha venido con el boleto en la mano; aunque son muchos los clientes que comprueban en el local el resultado de sus apuestas, nadie suele venir a verificar un gran premio”, añadió Salvi.
Al igual que en anteriores visitas de trabajadores de Loterías y Apuestas del Estado provistos de carteles con “gran premio”, el quiosco experimentó mayor afluencia de personal. En esta ocasión validó más de 25 millones de las antiguas pesetas. No pocas personas felicitaron a la dueña del local. Como siempre, Patricia Salvi agradeció la fidelidad de la clientela.
