El calendario es, ahora mismo, el principal handicap del Levante UD. La sobrecarga de partidos y el mínimo tiempo de recuperación entre un compromiso y otro condicionan el día a día del equipo de Paco López, que ante el Atlético de Madrid vio cómo Radoja fue la última víctima. El serbio sintió molestias en la zona isquiotibial en el ecuador de la primera mitad, si bien pidió aguantar sobre el verde. Ya al enfriarse en el descanso, el ‘5’ vio que no podía y Paco lo dejó en el banquillo. Faltaba la confirmación oficial de la lesión y ayer se publicó el parte médico. La dolencia del pivote se traduce en una «lesión muscular en el bíceps femoral del muslo derecho». El club prefirió no hacer público el tiempo estimado de baja, que queda «supeditado a la evolución de la lesión».

De este modo, el equipo pierde a uno de sus pilares en la medular para el partido del próximo sábado en el Metropolitano; el segundo encuentro consecutivo ante el líder de LaLiga. El Levante viajará al Wanda con la lesión de Radoja, pero también con las ausencias en el centro del campo de Campaña y Melero, ambos también en el dique seco por problemas musculares de distinta gravedad.

Hasta cuatro futbolista pueden juegan en lugar de Radoja. Son palabras mayores, porque el serbio acumulaba hasta nueve titularidades consecutivas en LaLiga y se han de añadir las eliminatorias de Copa (jugó en todas de inicio salvo en Valladolid y completó los 120 minutos ante el Villarreal). Y en estos partidos se vio la mejor versión del balcánico como granota; poco a poco fue cogiendo confianza en defensa y ganando protagonismo en su labor como socio entre los centrales para sacar jugado el balón.

Ahora Paco se debate entre cuatro nombres propios y dos sistemas. Malsa parece fijo porque estaba siendo otro de los habituales en el once del técnico. Y al francés se añaden la opción de Vukcevic, que ultima la recuperación de sus molestias lumbares, la de Róber Pier en una posición forzada (él es realmente central) pero en la que ya se ha defendido en otras situaciones de urgencia o la de Doukouré, inédito este curso tras una grave lesión y su periplo por El Alcoraz.

Malsa estará, sí o sí, en el once del Wanda Metropolitano. Lo contrario sería una sorpresa por parte del preparador, que contempla la posibilidad de jugar con el ex del Mirandés como único ‘stopper’ en un trivote (esquema que ya utilizó de inicio ante Osasuna con Radoja) o acompañar al parisino con Róber Pier con el clásico 4-4-2 con dos interiores. El gallego volvió a sumar minutos en el pivote ante el Atlético, aunque empezó jugando como central. Y no es la primera vez este curso que aporta en el centro.

Vukcevic ya se ejercita con el resto del equipo, aunque difícilmente juegue de inicio por su nulo ritmo competitivo. Cabe destacar que Vukcevic lleva en el dique seco más de un mes por unos problemas lumbares. Sus molestias le han dejado sin jugar desde la eliminatoria copera contra el Fuenlabrada, donde disputó 53 minutos y fue sustituido; en LaLiga, sin embargo, su última aparición se remonta al 22 de diciembre de 2020 (1-1 ante el Huesca). Por tanto, Paco López se esperará a ver realmente cómo se encuentra este viernes para ver si viaja o no a Madrid y, en caso de entrar en la lista, podría aportar de forma testimonial. Similar es el caso de Doukouré, que pese a llevar varias semanas con el equipo todavía no ha debutado desde su vuelta al club tras su cesión en el Huesca; en parte también porque llegó lesionado de gravedad.