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"El turismo debe ser nuestro motor para que no nos sigan cerrando servicios"

Aguilar cree que hay que exigir un transporte intramunicipal e intercomarcal en Ademuz para conectar con València, Llíria, Teruel o Requena

Cree que hay que generar un empleo de calidad para frenar el éxodo de personas del interior, además de crear residencias para mayores porque la actual está saturada

"El turismo debe ser nuestro motor para que no nos sigan cerrando servicios"L-EMV

Este es su segundo mandato como presidente, pero siempre ha estado vinculado con la mancomunidad. ¿Cómo lo lleva?

Nunca ha habido problemas para elegir presidente, casi siempre ha sido con unanimidad. Ha habido años que gobernaba el alcalde de Casas Bajas con una lista local, independiente, y le elegíamos a él. Ahora nadie quería ser presidente, así que yo me ofrecí a serlo siempre que he repartieramos funciones por áreas, que el resto de alcaldes me ayudaran en las tareas.

¿O sea que la Mancomunidad funciona casi como un ayuntamiento, no?

Sí, sí. Cada alcalde y alcaldesa se encargará de un área distinta. Es bastante complicado encargarse de todo uno solo.

¿Hay buena relación entre PP y PSOE?

Sí. Independientemente del partido que tuviera más mayoría, nunca se ha hecho rodillo, sino que todas las votaciones han sido acordadas. Solo recuerdo discrepancia una vez, el resto ha habido unanimidad cada mandato.

¿Lo afronta con ilusión?

Sí, pero necesitando ayuda del resto de alcaldes, como he dicho. Ahora somos una mancomunidad comarcal. No somos solo los siete alcaldes, somos 14 personas. Creo que somos la única mancomunidad comarcalizada ya.

¿En qué más cambia?

En que ahora tendremos el máximo de competencias para gobernar, sin cambiar los estatutos puedes tener toda la autonomía posible, como puede ser la policía, o el turismo. De esta última no la hemos solicitado porque no sabemos hasta dónde podemos llegar, no hay precedentes, nadie lo ha solicitado todavía y no sabemos si será beneficioso o no.

"El boom de la construcción trajo a muchas personas migrantes, pero se han ido también porque ya no queda trabajo"

¿Qué proyecto iniciaste en el último mandato y qué va a continuar?

Hemos tenido un gran crecimiento, sobre todo en personal, lo que ha repercutido en dar bastantes más servicios, contamos con un abanico amplio de sectores, con Servicios Sociales como el máximo exponente, porque es el más conocido y más demandado. Se da a la población mayor por la dependencia, pero también llevamos Juventud, Infancia o Violencia de Género. Se da el servicio de atención domiciliaria a las personas mayores, tanto de limpieza como para llevarlos al médico, por ejemplo. Hemos tenido que abrir la bolsa porque no encontramos gente para prestar el servicio. Se ha incorporado también la comida a domicilio a personas mayores que no pueden cocinar; antes lo llevaba el Ayuntamiento y ahora lo subvenciona la diputación, los consistorios y una pequeña parte el propio usuario.

¿Cómo enfocan el servicio a los jóvenes?

Hay un equipo de tres personas en Juventud para atenderles y realizar actividades para ellos y con ellos. La función es escucharles y hacer que participen, no tanto en la vida política, que es más complicado, pero que al menos demanden ellos qué quieren como comarca, qué necesitan, hay que escucharles.

Parte de los esfuerzos se han volcado también en los fondos europeos, ¿No?

Exacto, y hemos conseguido contratar a una persona para que busque proyectos europeos. Date cuenta que es una de las cosas más complicadas que hay, pero es donde está el dinero. También tenemos un Agente de Desarrollo Rural que busca las subvenciones y ayuda a las distintas administraciones, y atiende directamente a las personas si lo necesitan.

"Tenemos que generar un movimiento de personas que vengan y se mueva el capital privado para montar negocios como tiendas y servicios. Si no, la despoblación nos va ganando el terreno"

Entre estos servicios, ¿Queda alguno por implementar?

Queremos continuar con los que tenemos y hay uno recién incorporado, y queremos poner en valor, que es el Pacto por el Empleo, firmado entre la mancomunidad y Labora. De ahí hemos podido contratar a un administrativo, un agente de emprendimiento y una persona que lidia con los agricultores para ayudas o problemas en cultivos. Hemos creado también una marca territorial, ‘Qualitat Interior’. Es un sello de calidad al que podrán adherirse empresas, productos y lugares que cumplan una serie de estándares de calidad.

¿Es el turismo el motor de la comarca?

Queremos que sea uno de los motores. Es el objetivo después de haber puesto en marcha proyectos de desarrollo integral para el Rincón de Ademuz, como la Agroecología, recuperando variedades autóctonas en la agricultura. Fue muy bonito pero a la hora de crear puestos de trabajo no tuvo éxito, la gente no quiere seguir con la agricultura excepto los que ya están en ella. Por eso el turismo tenemos que moverlo, pero hay deficiencias pese al patrimonio histórico y natural que tenemos, con el paraje natural de la Puebla de San Miguel, el río Bohílgues y Ebrón, las rutas y el silencio, tan difícil de encontrar. La verdad es que nos falta traer a la gente. El turismo aumenta, pero no logramos posicionar el Rincón para que sea sólido. Debe ser nuestro motor para que no nos sigan cerrando servicios, como los bares, y a nivel político tenemos que generar un movimiento de personas que vengan y se mueva el capital privado para montar negocios como tiendas y servicios. Si no, la despoblación nos va ganando el terreno.

¿Se ha frenado algo la despoblación?No. Es muy difícil de de frenar. Por un lado, hay mucha población mayor que por desgracia va muriendo. Hay otros que van a la residencia de ancianos, pero como está llena desde hace bastante tiempo, los tienen que derivar a Teruel, Requena, Utiel o Cuenca. Con lo cual, los que no mueren pero no pueden quedarse, se van también de casa. Por no poderlos atender en el Rincón hay que hay que llevárselos a otras comarcas, y eso también es perder población. Por otro lado, el empleo es bastante deficitario. El boom de la construcción trajo a muchas personas migrantes, pero se han ido también porque ya no queda trabajo, y es una pérdida de población que se nota.¿Ni siquiera ampliando servicios?Hubo un momento en que la panacea era tener fibra óptica para poder estar conectados, y que las personas de la capital pudieran teletrabajar desde aquí y los pueblos nos llenaríamos. Pero no es cierto. No todos tenemos fibra, aunque parece que ahora en diciembre tiene que estar la fibra en toda la comarca. Aún así hay otras formas para tener conexión como el Plan Únbico Rural pero eso no atrae a la gente. Los que vienen al interior es porque tienen muy claro cómo quieren vivir. Verdaderamente hay servicios, no como en la capital, pero los hay: guardería más económica que en la ciudad, y los recorridos entre pueblos son cerca, como mucho 15 minutos de Castiel a Casas Bajas, en la ciudad por menos de eso no te mueves. Eso es una de las cosas que queremos reivindicar, el transporte intra e intercomarcal. Ha habido subvenciones directas a los ayuntamientos, que damos servicio de taxi a demanda para llevsar a València o Llíria a médicos y juzgados o a Ademuz a los bancos o comprar. Pero claro, deberíamos tener un servicio fijo que fuera recorriendo los municipios porque las personas mayores cada vez lo necesitan más.

También entiendo que la recogida de basura es la otra asignatura pendiente.

Sí, primero pensamos en la recogida puerta a puerta y ahora lo hemos modificado para que sea con contenedores inteligentes para abaratar el coste de lo que era el puerta a puerta. Por la orografía que tenemos había calles por donde no entran los camiones, habría que ir con carretilla. Lo hemos cambiado para modernizarlo, hacer aquí el compost para no tener que trasladarlo, y ser autosuficientes al margen del Consorcio Valencia Interior excepto por el resto, que sí tiene que ser tratado y enterrado por ellos.  

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