Los más de 400 trabajadores del Ayuntamiento de Calp ven que acaba otra legislatura y sigue sin salir adelante la Valoración de Puestos de Trabajo (VPT). Ha pasado más de un año desde su aprobación inicial. Pero el gobierno local (PP e independientes) ya no ha movido ficha. Y la reivindicación de que se regule la plantilla es histórica. Los empleados municipales llevan unos 15 años batallando para que se apruebe un documento que debe acabar con las discriminaciones salariales. Sin VPT, el complemento específico que percibe cada trabajador está sujeto al criterio político.

El presidente del comité de empresa, Andrés Ivars, avanzó que este jueves tendrá lugar una asamblea. Los trabajadores plantearán llevar a cabo movilizaciones.