Las policías de la Marina Alta y la Guardia Civil se están empleando a fondo para hacer cumplir las medidas impuestas por el Gobierno para superar la emergencia sanitaria del coronavirus. La policía de Dénia identificó ayer a 200 personas que salieron a la calle para realizar actividades no autorizadas. A un corredor de "running" los agentes lo sorprendieron tres veces. Le advirtieron de que volviera a casa, pero al rato en otro punto de la ciudad lo volvieron a ver corriendo. Lo sancionaron.

Mientras, en Calp, los agentes comprobaron que dentro de un bar había actividad. Se habían corrido las cortinas, y dentro había gente. También se multó a este establecimiento.

Además, la policía y la Guardia Civil están controlando los accesos al municipio y pidiendo a los trabajadores que acuden a Calp un certificado de su empresa. Les instan a que acudan cada uno en un coche.

En Teulada-Moraira, que ya ayer sancionó a tres bañistas que se saltaron el precinto de la playa y se metieron en el mar, hoy la policía ha multado a cuatro personas que estaban de fiesta en una terraza de un local cerrado. Estaban consumiendo alcohol.

La mayoría de la población está cumpliendo a rajatabla el confinamiento. Pero también hay unos cuantos imprudentes. Les tocará rascarse el bolsillo.