Una peligrosa caída de diez metros. Los bomberos han precintado esta mañana un tramo del litoral de les Rotes que Dénia que está junto al restaurante Mena. También ha acudido una patrulla de la Policía Local.

El riesgo es evidente. Los coches aparcan junto a las piedras del pretil. Quienes bajan de los vehículos y también quienes pasean despreocupados y se asoman pueden precipitarse desde una altura de unos diez metros.

Los bomberos han balizado esta zona para evitar que ocurra una desgracia. Con todo, la solución definitiva pasa por colocar un quitamiedos o una barandilla.

En el resto de este litoral, tras el pretil, hay tierra firme. Pero aquí está el vacío. La carretera linda con la parte superior de un muro de hormigón.