Los dos veterinarios de la Fundación Oceanogràfic han logrado suministrar una dosis de antibióticos con efecto de 30 días a la foca gris (Halichoerus grypus) que, procedente del Atlántico Norte, ha llegado a las costas de Altea-Xàbia después de pasar por el Algarve y Gibraltar. Los expertos han inyectado el antibiótico al lanzarlo con una cerbatana. El mamífero se halla desde ayer en la costa del Portitxol y en la cala de la Barraca de Xàbia.
Los veterinarios consideran que, con el alimento que le ofrecieron y este medicamento, la foca gris puede superar la posibilidad de sufrir una infección al menos en ese periodo de 30 días. El animal lleva una especie de "soga" (probablemente es una red de pesca enrollada) que le oprime el cuello y le ha provocado una herida.
Después de activarse la Red de Varamientos y con varios intentos fallidos de capturar el animal con la colaboración de diversos organismos provinciales y locales, se consiguió en el día de ayer lo que puede considerarse un hito, puesto por un lado la captura de estos pinnípedos, fuertes, ágiles y escurridizos, se hace en tierra, y por otro, gracias a un estudio realizado previamente en el Oceanogràfic se ha comprobado que este antibiótico es de una amplia cobertura.
En esta ocasión han colaborado agentes de la Policía Local de Xàbia.
El medicamento, que se le ha suministrado a través de teleinyección con una cerbatana, va dirigido tanto a una posible infección derivada de la herida, como a la que suelen sufrir estos mamíferos, en los que cualquier problema de salud se complica habitualmente con una neumonía. De esta forma se alarga la esperanza de capturar con éxito y con vida a la foca gris que presenta, por un lado, un enmallamiento con restos de basura sin identificar, que le genera una reacción, y por otro síntomas de enfermedad con un comportamiento en busca de áreas de remanso y un patrón de flotación y de respiración anómalos.
“No podíamos permanecer ajenos por lo que debemos de intentar su curación y retirarle el enmallamiento”, ha manifestado el responsable conservador de la Fundación Oceanogràfic, José Luis Crespo. La foca gris se encuentra en este momento en paradero desconocido a la espera de que vuelva a hacerse visible. Después de llegar a Altea, se la ha visto en la cala de Llebeig (Benitatxell y Teulada-Moraira) y desde ayer se encuentra en la costa del Portitxol de Xàbia.
