Que las playas estuvieran este fin de semana de bote en bote es normal. Había muchas ganas de disfrutar del litoral de la Marina Alta. Miles de vecinos de València y Alicante han acudido a estas playas. Pero el fin del toque de queda también ha tenido un rostro menos amable.

Los "botellones" han dejado suciedad y los incívicos han campado a sus anchas. El Ayuntamiento de Dénia ha difundido a través de sus redes sociales imágenes de destrozos y basura. Los vándalos han echado abajo una silla de proximidad de vigilancia de playas. En algunos puntos del extenso litoral de Dénia, la arena estaba salpicada de plásticos, latas y botellas, huella inequívoca del "botellón".

Papelera totalmente repleta de latas y basura y los residuos tirados fuera de ella Levante-EMV

Además, hay bañistas que no han aprendido la lección número uno del turismo sostenible, la de dejar incluso más limpio de lo que te lo encontraste el lugar donde disfrutas de la belleza de la naturaleza y la calidad de las playas y el baño. Las papeleras desbordaban de basura y los incívicos han dejado los desperdicios y las bolsas tiradas fuera de estos depósitos.

Papeleras volcadas por los incívicos Levante-EMV