Hay bañistas que bajan cargados como mulas. Portan neveras, sombrillas y hamacas. Ya lo pasan mal para descolgarse con tanto peso por las tres paredes verticales y de resbaladiza roca. La última, la más peliaguda, tiene una caída de unos 8 metros. Estos bañistas suelen colgar de las cuerdas en esas tres paredes del barranco las neveras. Las bajan y van dando tumbos. Algunos de estos bañistas, en un gesto mayúsculo de incivismo, deciden aligerar lastre para subir. Y arrojan en este lugar de abrupta belleza litoral las neveras y bolsas de basura repletas de latas de cerveza.
Esto ocurre en la cala de Els Testos del Poble Nou de Benitatxell. Es una de las más bellas del litoral valenciano. Y también una de las de más complicado acceso.
Los bañistas que no cuidan el entorno hacen algo incluso más peligroso que desparramar basura. Encienden fogatas. En el abrigo de Els Testos hay restos de hogueras. También en la orilla de la cala hay tizones. Prender fuego está prohibido y es un riesgo. Una chispa puede iniciar un incendio en este angosto barranco. Los primeros que se enfrentarían a una situación de enorme peligro serían los bañistas. El fuego les cortaría el paso; quedarían aislados.
La cala de Els Testos es un recodo espectacular del litoral valenciano. Es complicado llegar. Pero los incívicos se las arreglan para ensuciar los paraísos más recónditos.
Un acceso difícil que sorprende a numerosos bañistas
Los bañistas que bajan por primera vez a esta cala no saben ni por asomo lo que van a encontrar. Deben descolgarse con cuerdas por paredes verticales y resbaladizas de hasta 8 metros de altura.
