Los propietarios de los apartamentos de la Muralla Roja, el icónico edificio de Calp diseñado por Ricardo Bofill, son celosísimos de su intimidad. No quieren que se cuelen los curiosos ni los instagrammers que hacen lo que sea por tomarse una foto en las escaleras, la piscina y los laberintos de este complejo de apartamentos que está junto al mar y se terminó de construir en 1973. La Muralla Roja se ha convertido en un templo de la arquitectura moderna. Los propietarios sí franquean las puertas a las compañías que pagan una buena morterada por rodar aquí anuncios publicitarios.
Eso sí, en la Muralla Roja se puede hacer noche. Hay apartamentos de alquiler turístico. Quienes han estado de paso aseguran que vale la pena pagar el alquiler por disfrutar un fin de semana e incluso solo un día de un edificio que todos coinciden en calificar de espectacular.
¿Y cuánto cuesta pasar una noche en una de las viviendas de la Muralla Roja? En las plataformas de alquiler turístico, se ofrece un estudio con sofá cama por 103 euros la noche. Ese es el precio ahora que no es temporada turística. Mientras, en un apartamento ya más espacioso (70 metros cuadrados), pasar la noche sale por 148 euros. Dos noches cuesta 266 euros. Tanto en el estudio como en el apartamento el alquiler es para dos personas máximo.
Los precios en verano ya son otra historia. Una noche de julio o agosto en el apartamento cuesta 288 euros. Dos noches vale 437 euros.
Y, desde luego, hay quien alquila para descubrir los recovecos de esta maravilla arquitectónica. Pueden quejarse más o menos de que el estudio es estrecho o de que el sofá cama es un pelín incómodo, pero todos coinciden en que vale la pena apretarse una noche si se puede recorrer libremente esta genialidad de Ricardo Bofill.
