Acuerdo en Xàbia para recuperar una «pesquera» cerrada por un chalé de lujo

La promotora que bloqueó el paso en el acantilado del Cap de la Nau acepta reabrirlo

Falta una normativa que preserve estos históricos accesos

A la derecha, las obras del chalé de lujo que han cerrado la "pesquera" del Sogall

A la derecha, las obras del chalé de lujo que han cerrado la "pesquera" del Sogall / Levante-EMV

Alfons Padilla

Alfons Padilla

La imparable construcción de chalés de lujo en los acantilados de Xàbia da un paso atrás, «cede» un par de metros. La promotora del chalé colgado del abismo en el Cap de la Nau, chalé cuyas obras habían bloqueado el acceso a la histórica «pesquera» del Sogall, se ha comprometido a reabrir este paso. Fuentes municipales consultadas por Levante-EMV han asegurado que la empresa ha aceptado dejar expedito ese acceso.

Conviene aclarar que ese paso no es para senderistas ni turistas. Es extremadamente peligroso. Solo deben usarlo «encesers» (pescadores de los acantilados) tremendamente experimentados. No obstante, resulta esencial que exista y que no quede bloqueado por un chalé de lujo para que, desde el mirador público del Cap de la Nau, se pueda «interpretar» este arte ancestral y singular de pesca de la Marina Alta. Basta contemplar este paso y las escaleras de madera que están enganchadas al cortado de roca para sentir el vértigo y hacerse una idea de la heroicidad de estos pescadores. Eran labradores y descendían de noche a la pesquera para capturar algo de pescado y luego venderlo y lograr un dinero extra para sacar adelante a sus familias.

La precaria escalera de madera por la que descendían los "encesers"

La precaria escalera de madera por la que descendían los "encesers" / Levante-EMV

El Institut de Recerca Oceanogràfica de Xàbia (IROX) ya había exigido al Ayuntamiento de Xàbia que obligara a la promotora a reabrir este acceso.

El consistorio ha mantenido conversaciones con la empresa y ésta ha accedido a echar unos metros atrás el muro del chalé.

No es la primera vez (ni seguro que la última) que las obras en el acantilado invaden uno de estos pasos históricos. Falta una normativa que preserve las «sendas» de «les pesqueres de cingle». El ayuntamiento de Xàbia cuenta con un inventario realizado por vecinos que reivindican el valor cultural, histórico y natural de estos «caminos» inverosímiles en los acantilados.

Este escarpado litoral sigue sufriendo una fuerte presión urbanística. Ni siquiera la cartografía está adaptada a la realidad. Hay parcelas privadas que abrazan las paredes verticales de los acantilados. El urbanismo de los chalés de lujo hace equilibrios sobre el abismo.

El litoral del Cap de la Nau y de Ambolo. A la izquierda, l'Illa del Descobridor

El litoral del Cap de la Nau y de Ambolo. A la izquierda, l'Illa del Descobridor / Levante-EMV

«Sendas» de riesgo y solo aptas para «encesers»

«Les pesqueres» son un recurso turístico desde la distancia. De ahí la importancia de recuperar ésta del Cap de la Nau. Desde el mirador público se observa perfectamente la precaria escalera de madera que «cosida» a la roca del acantilado utilizaban los «encesers» para bajar al saliente o a la plataforma de cañizo desde la que lanzaban el «rall» o el anzuelo. Es una «senda» (senda es mucho decir, ya que hay que trepar por el cortado) extremadamente peligrosa. Los turistas (últimamente los hay muy imprudentes) deben mirarlas desde lejos. Y solo con mirar ya da vértigo.