La cantidad de mosquitos que hay en el marjal del Moros ha hecho imposible la visita al humedal por parte de turistas y vecinos este fin de semana de Sant Vicent. Aunque desde la conselleria se asegura que los tratamientos se iniciaron el pasado 2 de abril, fuentes de la misma reconocen que «se ha llegado un poco tarde como sucedió en septiembre y octubre del año pasado», ya que las actuaciones contra estos insectos finalizaron en agosto.
Ahora, la conselleria ha contratado un servicio para todo un año, que además del tratamiento, incluye control y seguimiento del mismo, aunque se insiste en que esto último se hace. Fuentes de la administración autonómica señalaban a la «tropicalización» de la zona, con los continuos cambios de clima, como uno de principales motivos de la aparición de estos focos de Aedes, que surgen en zonas secas que se inundan cuando llueve. «Tras las lluvias es cuando hay que actuar, acabando con las larvas, ya que cuando éstas son adultas es más difícil matarlas y el tratamiento en adultos es absurdo», decían.
En cuanto al tratamiento biológico que se está llevando a cabo consiste en introducir un «bacilus», que al ser ingerido se convierte en una especie de cristal y termina explotando en el interior del insecto reventándolo, como explicaban desde el departamento.
