El gobierno local de Sagunt no está dispuesto a que Lafarge continue con su actividad extractiva a costa de monte público. Así lo refleja la documentación remitida por el ayuntamiento a la Generalitat como respuesta a la petición de la cementera de ampliar en algo más de 14 hectáreas la cantera del Salt del Llop hacia la zona contigua de Las Margas.
La portavoz municipal, Teresa Garcia, explica que «con los parámetros legales que existen actualmente, no es posible abrir canteras en Las Margas ni en El Pinyal», que es la otra zona donde ayuntamiento y Lafarge habían acordado en el convenio firmado hace menos de dos años y medio que la empresa ampliara su concesión minera y garantizara así la continuidad de su fábrica en Sagunt.
«La primera premisa es ajustarse a la legalidad, es decir, que no se toque ni un árbol más en monte público», apunta Garcia. A partir de ahí «debemos conciliar los intereses de la empresa, los vecinos y el ayuntamiento, cuya principal preocupación en esta materia es conservar los bienes naturales. Y lo tenemos que hacer a través de un nuevo convenio que tenga en cuenta el actual ordenamiento jurídico», que, entre otras cosas, prohíbe actividades extractivas en monte público y a menos de 500 metros de usos residenciales, al tiempo que protege las infraestructuras verdes que se encuentran a menos de 10 kilómetros del litoral, según destacó la nacionalista.
Entre la documentación de la que ayer se dio cuenta en la comisión de seguimiento del convenio entre Sagunt y Lafarge se encuentra tanto un dictamen del secretario municipal, que invita a la revisión del polémico acuerdo suscrito en 2013 para compatibilizar la protección del parque natural de la montaña de Romeu y la actividad extractiva de caliza, como informes emitidos por los departamentos municipales de Urbanismo, Medio Ambiente y Actividades. Esta documentación responde a la información reclamada por la Generalitat dentro de la tramitación de la multinacional para obtener la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) sobre Las Margas.
Teresa Garcia añade que «entendemos que Lafarge es una empresa implantada en la ciudad que requiere apoyo, así que ofreceremos que siga su actividad extractiva fuera de monte público en aquellas zonas que tienen o tuvieron una concesión minera y presentan un impacto irreversible».
Seguir en el Salt del Llop
Entre estas opciones, la concejala de Compromís detalló que «hay canteras que no son utilizadas, pero tienen permiso en vigor tanto en Sagunt como fuera», a lo que añadió la actual concesión del Salt del Llop, donde «se debe determinar la cantidad de recursos que quedan» para establecer una prórroga en la concesión, que, en ningún caso, llegaría hasta el año 2042 como reclamaba la empresa, según precisó Garcia.
Otro de aspectos a los que refirió la portavoz municipal fue la tolerancia extractiva que se recoge en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Sagunt, aprobado en 1992, en algunas de la zonas por donde Lafarge quiere expandir la cantera. Según la nacionalista, estos parámetros urbanísticos también «están desfasados con respecto a la ley».
Este posicionamiento desfavorable a los planes de Lafarge es el segundo consecutivo desde la toma de posesión del tripartito de Sagunt. El primero se refería a la intención de la empresa de prorrogar sus derechos extractivos en la cantera del Salt del Llop hasta 2042, cuestión que, según recordó Garcia «no se contemplaba en el convenio».
