El Ayuntamiento de Sagunt no quiere más sustos como los vividos el pasado fin de semana, cuando los fuertes vientos se saldaron con la caída de dos enormes palmeras en pleno paseo marítimo del Port de Sagunt, en menos de 24 horas. Por ello, ya ha empezado revisar todos sus grandes árboles y tomar medidas para evitar nuevos casos, por mucho que esta vez no haya habido daños personales. Así lo explicaba a preguntas de Levante-EMV la edil responsable de la empresa municipal SAG, Roser Maestro, pues han sido los técnicos de la firma quienes se han encargado de estas tareas. «Desde que cayó la primera se dieron instrucciones de supervisar para evitar más riesgos y eso es lo que está haciendo no sólo en el paseo, sino con todo», decía.
Maestro insistía en que «con las palmeras se hace un seguimiento constante y muy estricto para impedir que le afecte la plaga mortal del picudo» y resaltaba que «nada hacía prever que pudiera pasar esto, pues ni había síntomas de que tuvieran problemas ni nunca había pasado nada parecido». Desde la empresa SAG se recalcó también que los ejemplares que cayeron «estaban en perfecto estado», se atribuía lo ocurrido al «fuerte viento» y se admitía que «aún está pendiente de valorar» su reposición.
