Los alcaldes de la Mancomunitat de la Baronia mantuvieron una reunión con carácter de urgencia para plantear sus puntos de vista sobre los protocolos y actuaciones que se han llevado hasta el momento desde los diversos ayuntamientos y el organismo supramunicipal.

Todos coincidieron en la necesidad de seguir concienciando a sus vecinos de la importancia de cumplir las normas, sobre todo entre los más jóvenes, ya que "sus irresponsabilidades en estos tiempos pueden desembocar en contagios a familiares que se encuentran entre grupos de riesgo". Pese a esta acotación, los mandatarios aseguraron que el porcentaje de población que hace caso omiso a las normas decretadas en el estado de alarma no supera el 3 %, así que "el balance es muy positivo".

Los alcaldes se emplazaron a repetir este encuentro para tratar de forma exclusiva cuestiones como la celebración de las fiestas patronales, la apertura de las piscinas municipales y el desarrollo de las escuelas de verano, ya que "hoy por hoy, estos tres asuntos son lo que más preocupan a los vecinos de la Mancomunitat de la Baronia".

El encuentro también sirvió para destacar el trabajo "directo y constante" de los servicios sociales para atender "las necesidades de los más vulnerables", al tiempo que se agradeció la labor de los empleados de los ayuntamientos y la propia mancomunidad, que han permitido llevar a cabo medidas económicas, de seguridad y desinfección.

Los alcaldes de la Baronia quieren señalar de igual forma la sensación de seguridad que existe entre los vecinos de la subcomarca, después de que durante los últimos meses se haya incrementado el número de patrullas de la Guardia Civil. En este objetivo fueron fundamentales las críticas manifestadas por las autoridades municipales con múltiples visitas a la subdelegación de Gobierno, que reclamaba más presencia del instituto armado para evitar las oleadas de robos. "Confiamos en que este buen hacer se prolongue durante mucho tiempo", aseguran.

Para terminar, los mandatarios lanzaron un mensaje "desde el absoluto convencimiento de que, entre todos, saldremos de esta situación sin acelerarnos, con la firme convicción de trabajar en aras de la reactivación de la economía en nuestros municipios, de instaurar la normalidad de forma paulatina y, cuando los tiempos de desescalada lo marquen la actividad social. Pero para poder conseguir las metas marcadas, nuestros vecinos deben ser pacientes y prudentes, pero no confiados en esa falsa sensación de seguridad de que ellos no se pueden contagiar, ya que el mínimo descuido podría acarrear consecuencias nefastas".