El Ayuntamiento de Sagunt y más concretamente su departamento de Patrimonio Municipal acelera para lanzar cuanto antes un primer lote de bienes inmuebles que permita llenar el agujero presupuestario de 6,6 millones de euros que dependen para este año de la venta de solares.
Aunque el tripartito ya incluyó una partida de 2,6 millones en su borrador inicial, el déficit de 2021 y la consiguiente prohibición de pedir un préstamo obligaron a elevar esa previsión, cuando, en los últimos 13 años, el consistorio de la capital comarcal apenas ha sido capaz de recaudar por este concepto un total ligeramente superior a los 1,6 millones de euros, según las liquidaciones remitidas al Ministerio de Hacienda.
La oposición ya se encargó de recordar éstos y otros números similares en el debate plenario por el presupuesto, a lo que desde el gobierno local se replicó que el departamento de Patrimonio estaba en plena faena para ordenar el inventario municipal, actualizar las tasaciones y sacar al mercado «propiedades que al ayuntamiento no le sirven, por las que haya demanda y que se encuentren aisladas dentro de una zona urbanizada», según explica a Levante-EMV la delegada del área, Ana María Quesada.
«Hay un extra de presión», admite la socialista sobre la necesidad de agilizar todo el proceso, aunque también apunta que esa urgencia tampoco es muy distinta a la que siente desde que hace poco más de un año se estrenó como concejala de gobierno «y las cosas van saliendo».
Una de las parcelas que hay voluntad de vender es la que se extiende por casi 9.200 metros cuadrados detrás de la urbanización de Ciudadmar en la playa del Port de Sagunt, que el ayuntamiento ser vio obligado a adquirir por 3,8 millones de euros, a los que se sumaron decenas de miles de euros más por los intereses. Éste es el precio en el que el jurado provincial de expropiación tasó los terrenos en 2010, así que una de las tareas pendientes desde Patrimonio Municipal es actualizar esa valoración.
Y en eso está. Hace apenas dos semanas fue cuando el consistorio adjudicó un contrato a Ander Gordo Pérez por algo más de 18.000 euros para que los dos próximos meses se encargue de la retasación de los inmuebles municipales que el tripartito necesita vender para no comprometer más de un tercio de las inversiones programadas para el presente ejercicio.
Una quincena de parcelas
Entre las propiedades que están incluidas en el expediente del presupuesto de Sagunt para 2022 hay una quincena. Siete se corresponden con parcelas entre 132 y 163 metros cuadrados valoradas en algo más de 64.168 euros cada una; tres en la UE-ZR5 Pinaeta de 400 a 500 metros cuadrados, tasadas entre los 775.000 y los 307.000 euros; dos en la UE-1 del SUP2 Este, unas de las cuales, muy próxima al nuevo instituto del Port de Sagunt, tiene más de 3.354 metros cuadrados y vale más de 2,5 millones de euros; así como otro par en el polígono F3 del plan parcial de Playas de Almardà, entre el que destaca la de más de 3.000 metros cuadrados y un valor por encima de 1 millón de euros.
Todas ellas suman un total ligeramente inferior a los 10,7 millones de euros, incluida la joya de la corona que suponen los terrenos detrás de Ciudadmar. El ayuntamiento ya trató hace unos años de deshacerse de estos terrenos. Fue concretamente el gobierno dirigido por Quico Fernández, que recibió críticas del todavía portavoz segregacionista, Manuel González, en términos que tienen cierto paralelismo con la actualidad: «La solución del gobierno supuestamente de izquierdas para paliar el déficit que genera con su incremento del gasto es la especulación urbanística».
La necesidad de ingresos extra en el Ayuntamiento de Sagunt para compensar la imposibilidad de pedir un préstamo ha motivado la actualización del inventario general de bienes y derechos, aunque la concejala de Patrimonio Municipal, Ana María Quesada, advierte que se trata de una puesta al día «parcial. Estamos saneando y actualizando lo que el ayuntamiento tiene en propiedad», explica la socialista.
Las últimas incorporaciones a este catálogo de bienes municipales fueron siete bienes adquiridos entre 2011 y 2014 en compensación por las deudas de sus anteriores propietarios. En esta lista destaca un apartamento en la comunidad de propietarios Sofía, en la avenida Cecina de Almardà, con una superficie de 72 metros cuadrados. También se encuentra un local comercial de 118 metros cuadrados en la calle Rey San Luis del Port de Sagunt; un tercio de la propiedad de un terreno rústico de casi 5.000 metros cuadrados en la partida de la Vila; así como cuatro plazas de aparcamiento, tres de ellas en la avenida Jerónimo Roure del polígono industrial Horno Alto y la otra de la calle Buenavista, según la documentación a la que ha tenido acceso Levante-EMV.
La incorporación de estos bienes se aprobó en el último pleno del ayuntamiento con los votos a favor de los tres grupos de gobierno, PSPV, Compromís y Esquerra Unida, además de Iniciativa Porteña y Ciudadanos, mientras que el PP y el concejal no adscrito, Carlos López, se abstuvieron. Cabe recordar que el edil de Vox no asistió a la sesión.
