El juez de Primera Instancia e Instrucción número 5 de Sagunt ha desestimado la orden de alejamiento pedida por la alcaldesa de Torres Torres, Amparo Bolós, frente al secretario general del PSPV-PSOE en la comarca, Ernesto Herrera, después de denunciarle por supuestas amenazas. Así lo ha decidido, al considerar que "no concurre la situación objetiva de riesgo exigida por los artículos 13 y 544 Bis de la Ley de Enjuiciamiento Criminal".

Además de estimar que "existen dos versiones contradictorias" y que la propia denunciante reconoce que los hechos "ocurren siempre sin la presencia del testigos", el magistrado-juez cree que "el trasfondo de los hechos es netamente político y entre las partes no existe más relación que la política".

Tras tomar declaración a un testigo de los hechos ocurridos el sábado, que originaron la denuncia, el magistrado-juez José María Quilis precisa que éste "no presenció amenaza alguna, como reconoce la propia denunciante".

En sus diligencias previas, el juez recoge "el temor de la denunciante a que se repitan los gestos amenazantes, que se vuelva a encontrar a solas con el denunciado y que le pueda causar algún mal'.

Así mismo, asegura que el denunciado "ha negado de forma coherente y razonable los hechos ofreciendo una visión alternativa de lo sucedido y manifestando que la denuncia obedece a meras motivaciones políticas".

Por ello, estima que "no queda indiciaramente acreditado, al menos en este estado del procedimiento, que la conducta de denunciado suponga un riesgo para la vida a la integridad física o moral de la denunciante, más allá de crítica política que puede realizar públicamente o en privado".

"Me siento perseguido"

A preguntas de Levante-EMV, Herrera solo apuntaba "me siento perseguido" y declinaba hacer más declaraciones "por respeto a los jueces y la justicia", decía después de haberse encontrado con militantes del partido, cargos orgánicos de la comarca y miembros de la ejecutiva provincial que habían ido a mostrarle apoyo cuando fue a declarar ante el juez.