El Ministerio da un paso para regenerar la costa norte de Morvedre

La dirección general de Calidad y Evaluación Ambiental formula la declaración de impacto ambiental, que no contempla medidas de retención de los 1,1 millones de metros cúbicos de arena trasvasada desde Cullera

Imagen de la playa de Almardà.

Imagen de la playa de Almardà. / Daniel Tortajada

El proyecto de regeneración de las playas de Almardà y Canet d'en Berenguer ya tiene su anhelada declaración de impacto ambiental (DIA), un trámite que llevaba meses atascado. El alcalde de Sagunt, Darío Moreno, considera este avance una "buena noticia", ya que la actuación impulsada desde la Demarcación de Costas "no podía avanzar" sin este paso. Así, los trabajos para recuperar y estabilizar el frente litoral de 4.100 metros entre la gola de Queralt y el puerto Siles "está más cerca de ser una realidad", en palabras del socialista a Levante-EMV.

Sin embargo, ahí se acaba el optimismo municipal, ya que el documento elaborado desde la dirección general de Calidad y Evaluación Ambiental del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico "no da respuesta" a los elementos que se reclaman desde los ayuntamientos de Sagunt y Canet o los colectivos vecinales. Y es que el impulsor del proyecto rechaza las estructuras fijas para garantizar la retención de los 1,1 millones de metros cúbicos de arena que se depositarán en las playas del norte del Camp de Morvedre. Sobre esta "rigidización" de la costa, el promotor de las actuaciones la descarta "por su efecto artificial en el paisaje, dinámica litoral, pérdidas permanentes de comunidades marinas bajo ellos, afecciones directas a espacios de la Red Natura 2000 y respuesta social negativa".

El alcalde se congratula del avance, pero plantea un proyecto complementario para garantizar la retención del material

Entre los múltiples efectos que se analizan en esta declaración de impacto ambiental, un apartado se refiere a la dinámica litoral y el transporte sedentario. Sobre este aspecto, la DIA destaca el aumento de la playa seca que implicará el aporte de arena, pero a la hora de buscar soluciones "naturales" para atenuar el oleaje y proteger la playa con el objetivo de retener este material, como plantean desde Sagunt y Canet, la respuesta se limita a señalar que "no existen soluciones «naturales» para tales propósitos", al tiempo que señala que los diques exentos, sumergidos y rebasables, "a día de hoy, tienen más inconvenientes ambientales que beneficios, por lo que se han descartado".

Proyecto complementario

Pendiente también de cerrarse la tramitación para que la arena de Cullera llegue a Sagunt, el alcalde asegura que, a la luz de la declaración de impacto ambiental, "es inevitable que nos reunamos con Costas y el ministerio e incluso con los encargados de incorporar al proyecto las apreciaciones de la DIA para incluir otros elementos de retención". En cualquier caso, el alcalde de Sagunt señala que estas novedades en el proyecto "refuerzan la idea de que, conjuntamente con Canet, planteemos actuaciones complementarias a las de Costas que se puedan ejecutar con fondos europeos" para evitar que los primeros temporales se lleven el material.

Esta DIA, firmada a 9 de junio por la directora general de Calidad y Evaluación Ambiental, Marta Gómez, recoge todos los posibles impactos del proyecto de regeneración de las playas del norte de Sagunt y Canet, que, con un presupuesto inicial de 18,4 millones de euros, no solo contempla el trasvase de arena, sino también el cribado y retirada de cerca de 113.000 metros cúbicos de gravas de las playas Malvarrosa, Corinto y norte de Almardà, así como la restauración del cordón dunar.

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