Una inundación inutiliza durante semanas el nuevo pabellón del Port

El nuevo pabellón del Port de Sagunt sigue sin poder librarse de los contratiempos. Cuando parecía que lo más difícil ya estaba superado al darse por acabadas las obras después de más de una década desde su inicio, un fallo en las electroválvulas de los depósitos de agua ha inutilizado la instalación durante semanas, ya que la inundación llegó hasta la pista y la dejó impracticable, según confirma a Levante-EMV el concejal de Actividad Física, Salud y Deportes, Javier Timón.

Tras requerir a la empresa que se hiciera cargo de los desperfectos, la primera respuesta fue negativa, al argumentar que alguien había manipulado estas válvulas eléctricas que cortan el agua al detectar que los depósitos están llenos. "Les dijimos que era imposible, porque están en altura y se necesita una escalera", explica el socialista. Así y una vez aceptada su responsabilidad, el siguiente punto de conflicto fue cuando la constructora señaló que no podía tener la pista arreglada hasta finales de septiembre, un plazo "inasumible" para el Ayuntamiento de Sagunt, según confiesa Timón.

Visita del jefe de obra

El edil de Deportes apunta que "ahora estamos apretando, porque les hemos dicho que urge". De hecho, este mismo martes está previsto que visite la instalación el jefe de obra y se aclare cuando podrá estar listo el pabellón, especialmente para el primer equipo del Fertiberia, que también este martes tendrá que iniciar en el Ovni el trabajo de pretemporada.

Con la esperanza de que los efectos de la inundación se corrijan lo antes posible, el resto del equipamiento para albergar partidos de Asobal ya está prácticamente listo, según informa Timón. El último es la pista azul desmontable que requiere la máxima categoría del balonmano español, cuyo suministro e instalación ha salido a licitación por 64.000 euros.

Pista azul

Su espesor, según recoge el pliego de condiciones, deberá ser de 7,5 milímetros y cubrirá una superficie de casi 1.000 metros cuadrados. El plazo de ejecución es de apenas dos semanas, aunque el montaje deberá esperar a que se resuelvan los desperfectos ocasionados por el agua.