Las setas, los pimientos y los pepinillos se escurren —separados— el tiempo suficiente para que suelten todo el líquido.
La gelatina se disuelve según su modo de empleo en el caldo de carne y, antes de que empiece a espesar, se vierten unas cucharadas de esta en una fuente redonda.
Sobre ella se coloca la mitad de las setas, de los pimientos, cortados en tiras, y de los pepinillos, cortados en rodajas. A continuación se vierte la mitad del caldo con la gelatina.
Cuando haya espesado del todo se añade el resto de las setas, pimientos y pepinillos y se echa el caldo que se había reservado. Entonces se introduce el recipiente en el frigorífico y se deja reposar varias horas.
Cuando haya cuajado y en el momento de servir, se coloca durante uno o dos minutos la fuente al baño María para que el áspic se desprenda del recipiente.
Se desmolda sobre una bandeja y se decora con los huevos cocidos cortados en rodajas. Se presenta acompañado de salsa tártara en un recipiente aparte.