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La decisión de la Generalitat de cerrar el repetidor de Morella que sirve para emitir la señal de TV Aragón y TV3 para Els Ports fue el detonante de dos concentraciones que se celebraron ayer en Morella y Castelló. En la primera localidad, alrededor de 300 personas se concentraron ante el ayuntamiento, convocados por el Centre d´Estudis dels Ports y el PSPV.

En el acto se leyeron distintos manifiestos en los que se recordó que TV3 se ve en la comarca desde hace 25 años. El corte también supondrá que la Puebla de Alcolea, localidad que depende administrativamente de Morella, se quede sin televisión, ya que con la llegada de la Televisión Digital Terrestre, sólo se podían ver las cadenas que hoy se cortan.

El acto comenzó con sonido de silbidos y luego se guardó un minuto de silencio «por el atentado que se comete contra la libertad de expresión».

La manifestación de Morella congregó a otros vecinos de la comarca, ya que el cierre del repetidor morellano afectará a Forcall, Cinctorres y Villores. En un comunicado, el Ayuntamiento de Morella, a través de su concejal de Nuevas Tecnologías, Ernest Blanch, señaló que el consistorio estudiará medidas legales «contra la actitud persecutiva del Gobierno valenciano, porque en la C. Valenciana continúan emitiendo numerosas radios y televisiones ilegales afines a su color político».

Protesta en Castelló

Muchos vecinos de Els Ports residentes en Castelló, al no poder asistir a la concentración de Morella, convocaron a través de Facebook una manifestación en la Plaza María Agustina de Castelló. En la misma se leyó un manifiesto contra la decisión de la Generalitat y se decidió plasmar el rechazo ante la Casa dels Caragols, sede del Consell en la capital de la Plana. Sin embargo, la protesta sólo congregó a unas decenas de personas, muchas menos de las que se pudo ver en Morella.

Por otra parte, el conseller de Presidencia del Gobierno balear, Albert Moragues, criticó ayer la «actitud» del Ejecutivo valenciano con el repetidor de TV3 en Morella que, a su juicio, supone «un ejemplo de lo que no se tiene que hacer». Tras anunciar un proyecto sobre el repoblamiento balear en Morella y en la Marina Alta en el siglo XVII, Moragues expresó su «solidaridad» con el alcalde de Morella, Joaquim Puig. Este censuró que la decisión de Francisco Camps está «fuera de cualquier lógica», ya que «estamos en el mundo de la globalización, donde es posible sintonizar en el municipio CNN y Al Jazeera y no TV3».