Se llama parcela de mezcla a las pequeñas superficies de viñedo plantadas con variedades autóctonas mezcladas que, en otras épocas, aseguraban la producción para el consumo de casa, ya que cada varietal tiene una diferente sensibilidad a enfermedades y fenómenos climáticos.

Dado el actual sistema de cultivo -en el que prima la rentabilidad por producción-, este tipo de parcelas está casi extinguido, pero todavía quedan pequeñas áreas localizadas en diversos puntos de la geografía española, como en la zona de La Manchuela, donde bodegas Gratias -pequeña compañía familiar con sede en el término municipal de Casas Ibáñez (Albacete)- ha puesto su objetivo para desarrollar su último proyecto, en este caso basado en el micromecenazgo (conocido en inglés como Crowdfunding).

Para Ana Gómez, enóloga de Gratias, este proyecto «es uno de los mayores retos que afrontamos desde que nació la bodega. Se trata de crear un vino plurivarietal con todas las uvas de esas parcelas de mezcla. Son varietales autóctonos, en su mayoría Bobal, Monastrell o Garnacha, pero también Marisancho, Teta de vaca, Pintaillo, Rojal, Valencín, Albillo o Moravia».

Para hacer realidad esta singular iniciativa, la bodega ha recurrido al micromecenazgo, ya que «queríamos hacer partícipes de este sueño a la mayor cantidad de gente posible», confiesa Ana. Para incentivar las aportaciones se han creado una serie de «recompensas» en función de la cantidad que se destine al proyecto que incluyen entre otras cosas lotes del nuevo vino y la participación en la fiesta de presentación, que tendrá lugar a finales de año. Con el dinero recibido se arrendarán parcelas, se comprará uva al agricultor y se cubrirán los gastos de producción y el coste de las experiencias vinculadas a las recompensas. Para Ana Gómez, este es un proyecto que «nos va a permitir salvaguardar y poner en valor las variedades de estas parcelas. No sólo por ser viñedo viejo y por tanto la calidad de la uva es inmejorable, sino además porque son reserva del patrimonio genético varietal de nuestra región».

El nuevo vino se llamará ¿Y tú de quién eres?, un nombre inspirado en el mundo rural, en la gente de pueblo, cuando los abuelos preguntaban a los más jóvenes que no conocían «¿Y tú de quién eres?» como medio para averiguar a qué familia pertenecían. Se trata de un vino que procede de viñedos viejos en secano y de manejo sostenible con vendimia manual. Fermenta en pequeños depósitos con pisoneos manuales para una extracción suave y posteriormente soporta un periodo de crianza recurriendo a barricas, tinajas y depósitos de acero inoxidable.

Para poder contribuir económicamente en esta iniciativa hay que visitar el sitio web vkm.is/gratias antes del 23 de mayo, donde se plantean las diferentes opciones de mecenazgo y sus correspondientes recompensas.