ágora

Ganas de proteger

María José Catalá

María José Catalá

Sí, también. Ganas de gestionar, de cuidar, de liderar y, también, ganas de proteger. Proteger a los nuestros y a lo nuestro. Me explico.

En Valencia hay dos quejas generalizadas en todos los barrios: Una, la suciedad. Dos, la inseguridad.

El concejal de Protección Ciudadana dice que son fake news, pero los datos del Ministerio del Interior indican que la delincuencia ha aumentado en Valencia un 25% desde 2019. Y eso son cifras reales. Las quejas que nos llegan desde los barrios de Valencia también son datos reales.

Hay otra realidad que los comités antibulos no desmienten: Hoy hay menos policías en Valencia que hace 8 años.

Y yo, que asumo la realidad, me he comprometido a aumentar la plantilla de la Policía Local y recuperar la Policía de Barrio que este Gobierno tiene en proceso de desmantelamiento. La dotaremos de recursos materiales y tecnológicos para prestar el mejor servicio.

La seguridad es una cuestión prioritaria que afecta a vecinos y a quienes nos visitan, y ahora estamos a tiempo de reconducir esta deriva de barcelonización.

También por redes sociales recibo mensajes de preocupación en determinadas zonas por problemas de convivencia por la okupación de viviendas. No es un problema puntual. Es otra realidad que deberíamos asumir.

Dese Moncloa, o desde formaciones independentistas, quieren imponer una Ley de vivienda que fomenta la ocupación ilegal y ataca la propiedad privada. Frente a esto, pondré en marcha en Valencia una oficina antiokupación para ayudar a vecinos y propietarios y trabajaré para dar de baja del padrón a los okupas y devolver el IBI a los propietarios que han sufrido una ocupación ilegal.

Debemos también sacar adelante la Ordenanza de convivencia, que lleva 7 años sin aprobarse pero que ya nos ha costado 120.000 euros en viajes y algún Mac.

Pero, como decía, hablo de proteger de los nuestros y proteger lo nuestro. Nuestras tradiciones y nuestras señas de identidad.

Esta semana celebramos el centenario de la Coronación de la Virgen de los Desamparados. Serán días que demostrarán la devoción que el pueblo valenciano siente por su patrona.

Y a los valencianos les digo que conmigo no les va a falta una alcaldesa que les represente en las principales fiestas y tradiciones valencianas. Que la Virgen de los funcionarios del Ayuntamiento dejará de estar en un almacén y que no habrá lonas que sustituyan el tapiz de flores.

Y, sin duda, las organizaciones que atacan nuestro Estatut de autonomía, como la autodenominada ONG del catalán, dejarán de recibir unas subvenciones a dedo que suman medio millón de euros en 8 años.

Pero si hablamos de lo nuestro, hablamos también de los clubes deportivos de la ciudad. Y concretamente, por el momento que atraviesa, al Valencia CF.

Como valencianista y como alcaldesa, voy a trabajar para tener una posición unánime y firme de todo el Ayuntamiento frente a la propiedad del club para exigir lo mejor para la ciudad.

Ganas de proteger a los vecinos, a Valencia y a todo lo que representa nuestra ciudad.