Ágora

Ganas de liderar

María José Catalá

María José Catalá

Antes de redactar este artículo, estaba en La Marina, en el acto que da inicio a esta campaña electoral.

Lo celebramos en Zeus, empresa puntera en un sector en auge, el de los datos, el valor más preciado en la era digital.

Desde allí, veía la dársena, Veles e Vents, las instalaciones de Biohub, de Marina de Empresas. Podía también ver el Puerto y la fachada marítima.

Estando allí es imposible no pensar en la transformación que ha tenido Valencia en los años de Gobierno del Partido Popular y en todo lo que nos queda por hacer.

Es inconcebible que esta ciudad haya estado durante ocho años paralizada por la descoordinación, por la falta de ambición, de determinación y de liderazgo de este Gobierno municipal.

Por eso, una de mis principales motivaciones para ser Alcaldesa de Valencia es conseguir que esto cambie. Que Valencia se ponga en marcha. Porque Valencia puede y debe ser líder y un referente en España y en Europa.

Esta ciudad no aguanta ni un minuto más parada. Porque un minuto más, significa perder posiciones frente a otras muchas ciudades, no solo españolas.

Yo tengo esas GANAS de liderar que este Gobierno no ha tenido en ocho años. Quiero liderar la segunda transformación de Valencia que pondrá los cimientos para aspirar a ser la segunda ciudad de España.

Y esa segunda transformación tendrá su epicentro en la fachada marítima. Es la asignatura pendiente de Valencia y el lugar que marcará la próxima década de esta ciudad, desde el respeto a su patrimonio y su identidad.

Valencia debe ser fuerte y reivindicativa ante el resto de Administraciones y exigir las infraestructuras necesarias para su desarrollo. Hablo del soterramiento de las vías de Serrería, hablo del Canal de Acceso, del Túnel pasante, del Corredor Mediterráneo. Y hablo también del Puerto.

El Puerto de Valencia es un motor económico fundamental, por donde circula el 50% del PIB de España. Sin embargo, el Gobierno de Pedro Sánchez tiene paralizado en Consejo de Ministros el proyecto que culminará la ampliación de nuestro Puerto. Una inversión privada de mil millones de euros, básica para nuestra competitividad, bloqueada por el PSOE y por Compromís.

Ninguno de estos partidos han tenido reparos en la ampliación de nuestro principal competidor, el Puerto de Barcelona. Es el ecologismo de boquilla de la izquierda.

Yo voy a pelear y exigir respeto a esta tierra y a un progreso totalmente compatible con la sostenibilidad.

Valencia va a volver a llamar a todas las puertas y contar con el sector empresarial, el sector innovador y emprendedor para estar en el sitio que le corresponde.

Porque es el gran trabajo y la iniciativa de estos sectores lo que ha sacado adelante La Marina, a pesar de la parálisis y las trabas de este Gobierno municipal. Es urgente una solución para poner definitivamente en marcha La Marina desde la coordinación del Ayuntamiento con la Autoridad Portuaria y la Generalitat.

Valencia tiene GANAS de liderar, con visión de ciudad, y su fachada marítima será protagonista.