El BEI y el municipalismo valenciano

El Banco Europeo de Inversiones (BEI) es una entidad clave para impulsar la financiación de las pymes y todos los sectores productivos con el objetivo de ser más innovadores y competitivos. Este ente tiene una relación especial con los fondos europeos, porque es el órgano financiero de la UE y el que ejecuta la liquidez de los créditos. Es un organismo comunitario, que fue creado en Roma y se ratificó en el Tratado constitucional de 1958. Además, es una institución con independencia estatutaria en capacidad financiera y procedimientos de decisión propios para elaborar las instrucciones de inversión en cada Estado.

Uno de los objetivos principales del BEI es el de generar financiación a través de créditos y transferencias para cumplir con la inversión de la política cohesión que marcan las instituciones europeas. Por otra parte, forman parte del BEI todos los Estados miembros de la UE y automáticamente quedan suscriptos al capital del banco que se encuentra regulado en el artículo 309 del TFUE para garantizar la igualdad en el mercado de la UE y financiar las inversiones en todas las regiones y municipios de la UE.

España da un paso en firme por el euromunicipalismo con la elección de Nadia Calviño como presidenta del BEI. Va a ser la primera mujer en dirigir el organismo y la primera española. Esto afianza la apuesta por el gobierno de Pedro Sánchez en la gobernanza multinivel y situa a nuestro país como la locomotora europea. El papel del BEI se ha reorientado a consecuencia de la crisis del coronavirus en el programa anual de inversión y flexibilidad del plan de inversiones de la UE siendo determinante en las inversiones de la agenda verde y digital y en el impulso de las relaciones público-privadas.

El BEI es un inversor a largo plazo y no suele hacer este tipo de inversiones en un corto periodo de tiempo, pero es necesario para la liquidez inmediata, la coordinación y la unión de fuerzas con diferentes bancos públicos como el ICO en España. Además, ha dado un impulso a las empresas con un acuerdo histórico para las PYMES y les da prioridad en la inversión a los sistemas de salud. Por otra parte, el BEI juega un papel clave en el plan de recuperación (Next Generation EU) donde los instrumentos para impulsar la inversión se ejecutarán en el 75% a través del mecanismo Invest EU siendo el instrumento de apoyo a las empresas europeas y a los ayuntamientos para las inversiones sostenibles.

El BEI además de todo lo anterior está alineando todas sus acciones con los Acuerdos de París y es el mayor banco verde de inversión en todo el mundo. Así, que la transformación del BEI en un banco climático toma mayor relevancia teniendo en cuenta su papel clave en la recuperación económica en la era ‘postcorona’. El informe The EU climate bank pone de manifiesto la cantidad de proyectos apoyados por el BEI que deben cumplir con los parámetros de la transición ecológica. Los proyectos de infraestructuras que apoya el BEI en energía y transporte deben ser más compatibles con los criterios del Green Deal y Acuerdo de Paris adquiriendo un papel relevante en la consolidación de la revolución verde para poner el foco de la sostenibilidad en todos sus proyectos.

En definitiva, que España tenga la oportunidad de liderar el mayor banco inversor en términos de gobernanza multinivel es una magnífica noticia. Es una necesidad por parte de los técnicos de la administración, gestores públicos, gestores privados y trabajadores el tener la disposición para ampliar conocimientos y aplicar todos los conocimientos para hacer las inversiones como propias. En mi opinión, nos llevara a reimpulsar nuestros sectores productivos más tradicionales como la agricultura y el desarrollo rural consolidando un nuevo modelo de economía circular basada en la sostenibilidad y digitalización de los recursos naturales en nuestros ecosistemas locales.